Los obispos latinoamericanos, a través del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), expresaron su “cercanía y solidaridad” con Ecuador, ante los hechos de violencia que se han desatado en el país esta semana.
La situación en Ecuador se ha ido agravando en los últimos años, con un aumento significativo de la pobreza, los homicidios y el narcotráfico. La violencia llegó a un punto crítico este lunes 8 de enero, con motines en al menos seis cárceles del país.
En las horas siguientes se registraron secuestros a policías, asesinatos y actos vandálicos por parte de individuos pertenecientes a bandas de crimen organizado.