Tus carismas

Se reparten a los catequizandos llamitas con los nombres, procurando que a nadie le toque el suyo. Cada uno debe escribir un carisma que ha descubierto en el compañero. Después se les pide que roten la llamita dos o  tres puestos a su derecha, el que la recibe observa y  escribe lo que considere conveniente. Así se procede una o dos veces más. Luego se recoge todo y se le entrega a cada uno su llamita.

VARIANTE: Primero cada cual escribe su carisma, y luego se rotan las llamitas.

Este material es una cortesía de la Hna. María Consuelo H.B.