Un total de 17 misioneros fueron asesinados en el mundo durante 2025, el Año Jubilar de la Esperanza. Con estas cifras, el número de misioneros y agentes pastorales que han perdido la vida de manera violenta desde el año 2000 hasta hoy asciende a 626.
La Agencia Fides ha publicado este 30 de diciembre su informe anual, en el que documenta los asesinatos de misioneros y todos los cristianos católicos comprometidos de algún modo en la actividad pastoral, que han muerto de forma violenta.
El reporte incluye sacerdotes, religiosas, seminaristas y laicos que fallecieron a causa de su fe, en contextos frecuentemente marcados por la violencia, la pobreza extrema y las injusticias. En muchos casos, se trata de auténticos testigos del Evangelio que permanecieron fieles a su misión hasta el final, ofreciendo gratuitamente su vida a Cristo.
África vuelve a ser el continente más golpeado, con diez misioneros asesinados: seis sacerdotes, dos seminaristas y dos catequistas. En el continente americano se registraron cuatro muertes —dos sacerdotes y dos religiosas—, mientras que en Asia fueron asesinados un sacerdote y un laico. En Europa, el informe incluye el asesinato de un sacerdote.
Asesinados por su fe en África
En Burkina Faso (África), fueron asesinados los catequistas Mathias Zongo y Christian Tientga, atacados por un grupo de hombres armados cuando se encontraban cerca de la localidad de Bondokuy, mientras viajaban en una motocicleta.