La Arquidiócesis Primada de México señaló que en el tiempo de Adviento que comienza este domingo 30 de noviembre “causa mucha ilusión adornar la casa, pero la invitación que queremos hacer es darnos tiempo para también adornar el alma”.
En el editorial de este primer Domingo de Adviento en su semanario Desde la Fe, la arquidiócesis advirtió a los creyentes que en Adviento y Navidad “no basta con encender luces en las calles, pues hace falta dejar que Cristo encienda la luz que apagaron esos momentos que a veces nos han oscurecido”.
El Adviento, el tiempo de preparación para el Nacimiento de Jesús en Navidad, se extiende este año desde el domingo 30 de noviembre hasta el atardecer del 24 de diciembre. Este primer Domingo de Adviento comienza además un nuevo año litúrgico para la Iglesia.
La Arquidiócesis de México destacó que el Adviento “es un período breve en el calendario, pero intenso en significado para la Iglesia y para el mundo, porque anuncia que Dios está en medio de nosotros, que la historia tiene dirección y que la esperanza está fundada en la certeza de la promesa hecha por Cristo”.
“Este tiempo no puede vivirse como un simple tránsito hacia la Navidad, sino como un espacio de vigilancia interior, donde cada uno de nosotros tenemos la oportunidad de disponernos a escuchar a Dios que viene de manera silenciosa, pero siempre transformadora”, añadió.
“Adviento es espera, conversión y alegría”, precisó.