El Papa Francisco expresó su intención de tomarse el tiempo necesario para discernir quién asumirá el gobierno pastoral del Vicariato General de Roma, el cual ha quedado vacante desde el pasado 6 de abril, tras haber nombrado penitenciario mayor al Cardenal Angelo de Donatis.
“Debido a la delicada naturaleza del papel del cardenal vicario, el Papa Francisco ha comunicado a los obispos, sus estrechos colaboradores, que se tomará un tiempo para realizar un sano discernimiento sobre la persona que desempeñará este papel”, se lee en un comunicado difundido el 8 de abril, tras un encuentro del Santo Padre con el Consejo Episcopal romano en el Palacio Apostólico.
“En esta fase de transición el Santo Padre animó a los obispos a continuar el ministerio pastoral y las actividades administrativas ya iniciadas anteriormente”, continúa el mensaje.