Administrador asume diócesis argentina tras renuncia de 2 obispos en menos de 3 meses

Por Walter Sánchez Silva

21 de enero de 2024

Ene 21, 2024

El Administrador Apostólico de Mar del Plata, Mons. Ernesto Giobando, asumió el cargo el viernes 19 de enero y celebró su primera Misa en la Catedral local, luego que dos obispos electos renunciaran sucesivamente a esa diócesis en Argentina en menos de tres meses.

Un administrador apostólico es elegido para hacerse cargo interinamente de una diócesis o jurisdicción eclesiástica mientras la sede está vacante y, por lo tanto, hasta el nombramiento del siguiente obispo.

“Hace 4 días me enteré de esta tarea pastoral, y con ello me entusiasmé, no vengo de vacaciones, vengo a acompañarlos, a estar con ustedes”, indicó el también Obispo Auxiliar de Buenos Aires.

“Le pido al Señor que me dé la gracia de poder acompañar, de estar presente en esta difícil situación, de poder ayudar”, agregó el prelado.

“Querido pueblo de Dios que peregrinamos en esta diócesis, que el Espíritu Santo nos conceda la fuerza para salir adelante, que la Virgen nos cubra con su manto, que el buen pastor, el Beato Eduardo Pironio nos aliente en a ser signos del amor de Dios. Que Santa Cecilia nos acompañe”, concluyó.

La Misa, según informa la diócesis de Mar del Plata, fue concelebrada por los sacerdotes P. Ariel Sueiro y P. Juan Pablo Arrachea, párroco y vicario de la Catedral, respectivamente, así como por los sacerdotes del colegio de consultores.

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Mons. Giobando tiene 64 años. Fue ordenado presbítero jesuita el 17 de noviembre de 1990 en el Colegio Máximo de San Miguel en la provincia de Buenos Aires, el lugar donde el Papa Francisco fue profesor cuando era sacerdote.

En la Conferencia Episcopal es miembro de la comisión Apostolado de los Laicos y Pastoral Familiar, y en la Arquidiócesis de Buenos Aires es el vicario episcopal de la zona Flores, donde está el barrio en el que vivió el Santo Padre.

Diócesis de Mar del Plata: 2 renuncias de obispos en menos de 3 meses

La diócesis de Mar del Plata sigue esperando el nombramiento de un obispo, luego que dos prelados electos renunciaran al cargo antes de asumirlo.

El primero fue Mons. José María Baliña, designado el 21 de noviembre de 2023, que renunció el 13 de diciembre, indicando que tiene algunos problemas de salud y señalando algunos temas personales. El prelado, que cumplió 65 años el 8 de enero, era Obispo Auxiliar de Buenos Aires.

Tras la renuncia de Baliña, el Papa Francisco nombró el mismo 13 de diciembre a Mons. Gustavo Larrazábal como Obispo de Mar del Plata, cargo al que renunció el 17 de enero, sólo tres días antes de que tomara posesión de la diócesis, programada para el sábado 20 de enero.

Unos días antes, el 9 de enero, la Nunciatura Apostólica se había pronunciado para expresar “total confianza” en Larrazábal, ante algunos rumores en su contra difundidos en la prensa local, que indicaban la existencia de antiguas denuncias en su contra.

Según la Nunciatura, esos rumores “no tienen fundamento”, pero Larrazábal prefirió dar un paso al costado y continuará ejerciendo su cargo anterior de Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de San Juan de Cuyo, en donde no se han pronunciado públicamente al respecto.

Al explicar las razones de su renuncia, Mons. Larrazábal señaló: “luego de un proceso de discernimiento y oración realizado muy a conciencia, he llegado a la conclusión de que no es oportuno asumir el gobierno pastoral de las Diócesis de Mar del Plata”.

Walter Sánchez Silva
Soy esposo desde 2008. Con mi esposa tenemos tres hijos aquí y uno que se fue al cielo en 2023, antes de nacer. Desde que me incorporé a ACI Prensa en 2005, he tenido la oportunidad de cubrir diversos eventos de la Iglesia Católica. Entre ellos, las Jornadas Mundiales de la Juventud en Colonia, Madrid y Río de Janeiro y los viajes apostólicos del Papa Benedicto XVI a México y del Papa Francisco a Corea del Sur. He sido enviado al Vaticano para cubrir los sínodos de la Familia, en 2015; de la Amazonía, en 2019 y el de la Sinodalidad, en 2023. Sigo de cerca la situación de la Iglesia Católica en Nicaragua, que sufre la persecución de la dictadura de Daniel Ortega, así como la actualidad eclesial en la región.