En Tierra Santa, donde conviven cristianos católicos, ortodoxos, anglicanos y protestantes, la celebración de la Navidad ocurre tres veces en menos de un mes.
La razón es, principalmente, de calendario. La Natividad del Señor Jesús se celebra el 25 de diciembre para la mayoría de cristianos. Es el caso también de los ortodoxos, con un ligero matiz: para la mayoría de ellos es el 25 de diciembre del calendario juliano, que se encuentra 13 días atrasado con respecto al calendario gregoriano, usado por la mayor parte de los países del mundo desde que fuera establecido por el Papa Gregorio XIII en el siglo XVI.
Así, la celebración del Nacimiento de Cristo Jesús se celebra por primera vez en Tierra Santa el día 25 de diciembre, principalmente entre católicos, anglicanos y protestantes. Exactamente 13 días después, en lo que para la mayoría de países es el 7 de enero, los ortodoxos celebran la Navidad.
Una tercera comunidad cristiana tiene una fecha distinta para la celebración del Nacimiento de Cristo.
La Iglesia Apostólica Armenia, también conocida como Iglesia Ortodoxa Armenia, celebra el 6 de enero tanto el nacimiento como el bautismo del Señor, en un criterio de elección de fecha que se remonta a los primeros siglos del cristianismo, cuando las distintas comunidades de fe buscaban definir un día para celebrar el nacimiento de Jesús.
Aunque en el resto del mundo los armenios adoptaron el calendario gregoriano desde 1923, esta comunidad en Tierra Santa sigue rigiéndose por el calendario juliano. Por esta razón, su celebración de la Navidad ocurre, según el calendario occidental, 13 días después del 6 de enero: el 19 de enero.