El exorcista P. Francesco Bamonte advierte en una carta titulada “El engaño de Halloween, la belleza de Todos los Santos” que celebrar la Noche de Brujas equivale, aunque sea de forma inconsciente, a rendir culto al demonio.
El vicepresidente de la Asociación Internacional de Exorcistas (AIE) explica que todo aquello que se celebra en Halloween —como la violencia homicida, la burla de la muerte y lo macabro— es una “clara señal de una grave forma de malestar interior extendido en la sociedad actual”.
El P. Bamonte denuncia también la “maquinaria comercial” que alimenta esta fiesta, que a su vez “confirma las profundas transformaciones culturales causadas por la secularización, con su contradictoria recuperación de la mentalidad mágica que culmina en un renacimiento neopagano”.
El verdadero origen de Halloween
El exorcista italiano advierte del peligro que supone inculcar esto a los más pequeños y los jóvenes, y afirma que, en los últimos años, “círculos ocultistas y satánicos, disfrazados bajo la etiqueta de asociaciones culturales” organizan en las semanas previas al 31 de octubre espectáculos que forman parte de una estrategia precisa “que no es en absoluto casual”.
El P. Bamonte explica que esta fiesta tiene sus raíces en una celebración religiosa pagana llamada “Samhain”, que tuvo su origen entre los celtas y que hoy en día sigue celebrando la “nueva brujería de nuestro tiempo”, conocida como “Wicca”.