Muy cerca al ingreso a la Basílica de Nuestra Señora Guadalupe en Ciudad de México, en un espacio sencillo y algo desapercibido, hay una réplica de la Virgen María, diseñada especialmente para que los ciegos la puedan "ver" con sus manos.
"Es una donación hecha por el Instituto de Cultura Italiana y la Embajada de Italia", explicó a ACI Prensa el sacerdote italiano y misionero javeriano Umberto Mauro Marsich, la mañana del 11 de febrero, mientras limpiaba la imagen, elaborada con fibra de nylon muy resistente.
El sacerdote dijo que la imagen es "una donación a la Arquidiócesis de México, para que los invidentes puedan venir aquí" a venerar a la Virgen de Guadalupe.