El Papa León XIV se reunió este martes 14 de octubre con el presidente italiano Sergio Mattarella en el Palacio del Quirinal en Roma, resaltando los fuertes lazos entre ambos Estados y la necesidad de trabajar por una paz duradera en todas las partes del mundo.
Mattarella dio la bienvenida al Santo Padre y a su delegación —que incluía al Secretario de Estado del Vaticano, el Cardenal Pietro Parolin, y a la presidenta de la Pontificia Comisión para el Estado de la Ciudad del Vaticano, la Hermana Raffaella Petrini— en su residencia en Roma para fortalecer los históricos lazos políticos entre la Santa Sede e Italia.
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El Santo Padre habló de la “sincera amistad y fructífera colaboración recíproca” entre Italia y los Pontífices y subrayó la necesidad de que ambos Estados contribuyan a los procesos multilaterales de paz en regiones como Medio Oriente y Europa.
“Renuevo, por tanto, el sentido llamamiento para que se siga trabajando por restablecer la paz en todas las partes del mundo y para que se cultiven y promuevan cada vez más los principios de justicia, equidad y cooperación entre los pueblos, que son su fundamento irrenunciable”, dijo en su discurso del 14 de octubre.
León XIV elogió el compromiso del gobierno italiano para “aliviar situaciones de penuria causadas por la guerra y la pobreza”, en particular sus esfuerzos para apoyar a los niños en Gaza.
“Se trata de aportes sólidos y eficaces para construir una convivencia digna, pacífica y próspera para todos los miembros de la familia humana”, afirmó.

Este martes, el Santo Padre donó 5.000 dosis de antibióticos para niños en Gaza tras la apertura de corredores humanitarios clave hacia la ciudad, después de que el acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás entrara en vigor el lunes.
A la luz del 800º aniversario de la muerte de San Francisco de Asís, patrono de Italia, en 2026, León habló también sobre la “urgente cuestión del cuidado de nuestra ‘casa común’”.
“San Francisco nos enseñó a alabar al Creador a través del respeto por todas las criaturas, proclamando su mensaje desde el corazón geográfico de la península [italiana] y transmitiéndolo, por la belleza de sus escritos y el testimonio de su vida y la de sus hermanos, a través de las generaciones hasta nosotros”, dijo.
“Por esta razón, creo que Italia ha recibido, de modo especial, la misión de transmitir a las naciones una cultura que reconoce a la tierra como ‘una hermana con la que compartimos la vida y una hermosa madre que abre sus brazos para acogernos’”, continuó, citando la carta encíclica del Papa Francisco, Laudato Si’.
A comienzos de este mes, el Senado italiano aprobó un proyecto de ley que restablece la fiesta de San Francisco de Asís, el 4 de octubre, como día festivo nacional.
Hacia el final de su discurso, el Santo Padre señaló la disminución de la natalidad en Italia y llamó a un “esfuerzo concertado” para promover decisiones en todos los niveles a favor de la familia y para defender y proteger la vida “en todas sus fases”.
“En particular, deseo subrayar la importancia de garantizar a todas las familias el apoyo indispensable de un trabajo digno, en condiciones justas y con la debida atención a las necesidades relacionadas con la maternidad y la paternidad”, afirmó.
“Hagamos todo lo posible para dar confianza a las familias, sobre todo a las familias jóvenes, para que puedan mirar al futuro con serenidad y crecer en armonía”, prosiguió.

En su discurso de bienvenida, Mattarella habló del “vínculo indisoluble” entre Italia y el Vaticano y elogió la labor de los padres fundadores de la Unión Europea, “muchos de los cuales tenían un trasfondo cristiano” y reconstruyeron la paz en la región tras la Segunda Guerra Mundial.
Recordando los constantes mensajes de paz del Papa León desde su elección, el presidente italiano dijo que los líderes políticos tienen la responsabilidad de “rechazar la glorificación del conflicto” y “fomentar el diálogo y el entendimiento mutuo”.
“Esa paz, como usted enfatizó, comienza con cada uno de nosotros, y por eso es tan esencial desarmar, desarmar nuestros corazones y desarmar nuestras palabras”, dijo.


