Desde la Conferencia Episcopal Peruana recordaron el “paso evangelizador” que tuvo el hoy Papa León XIV por las tierras del país sudamericano, donde desarrolló su labor pastoral durante muchos años.

En un comunicado difundido con ocasión de la elección de León XIV —antes Cardenal Robert Prevost—, los obispos peruanos aseguraron su “profundo gozo y gratitud”.

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“El Santo Padre conoce nuestra tierra en profundidad: desde las arenas calientes de nuestras costas, la indomable fuerza de nuestra sierra y el corazón verde de nuestra Amazonia”, expresaron los prelados peruanos, que recordaron que, primero como sacerdote y luego como obispo, tuvo una “entrega generosa a la Iglesia en el Perú”.

Esto, indicaron, “particularmente su labor como Vicepresidente en la Conferencia Episcopal Peruana, y como Obispo de la Diócesis de Chiclayo, y Administrador Apostólico de la Diócesis del Callao, donde supo ejercer su liderazgo con sabiduría, humildad y un profundo amor por el pueblo de Dios”. 

“En su paso evangelizador por nuestro Perú fortaleció la fe con su mensaje atento a las necesidades de los humildes, con su palabra sabia y prudente que educaba en la búsqueda de la verdad, con su cercanía afable a todos, creyentes y lejanos, siempre movido por el amor a Jesucristo”, expresaron.

Los obispos peruanos resaltan que “en este Jubileo de la Esperanza nos sentimos bendecidos por el Señor”, y agradecieron a Dios “por haber escogido a un hombre cuyas virtudes humanas, espirituales y pastorales son muy grandes”.

“Hemos tenido el privilegio de conocer de cerca su testimonio de vida y su servicio a los más humildes”, indicaron, añadiendo que “su cercanía, su palabra oportuna, su espíritu de comunión y su compromiso con los más necesitados, han dejado una huella imborrable en nuestra Iglesia y en nuestra sociedad”.

Los obispos aseguraron luego sus oraciones para que Dios le conceda a León XIV “un pontificado fecundo y luminoso, guiado por el Espíritu Santo, para gloria de Dios y salvación del mundo”.

“Que su ministerio sea fuente de unidad, esperanza y renovación para toda la humanidad”, pidieron.

“Desde el Perú, le expresamos a Su Santidad nuestro filial cariño, nuestra obediencia en la fe y nuestra devoción a su ministerio Petrino”, añadieron.

Al final de su mensaje, los obispos confiaron al nuevo Papa al Señor de los Milagros, a la Virgen María, a Santa Rosa de Lima y a San Martín de Porres: que “lo acompañen siempre en esta alta y santa Misión al Servicio de la Iglesia y de la humanidad”.