Al pie del Pic Macaya, la montaña más alta de Haití, una parroquia creada en agosto de 2023 se ha convertido en un faro de paz y armonía en medio del caos, la violencia y la muerte que reinan en el país. Su párroco, el camiliano Massimo Miraglio, trabaja por construir un mejor futuro, luchando “contra el odio y el resentimiento”.
Desde hace varias semanas, el pueblo haitiano ha sido golpeado por la violencia de las bandas criminales que operan libremente en el país, especialmente en Puerto Príncipe, donde controlan el 80% del territorio sin oposición alguna de la policía.
El P. Miraglio, de origen italiano, expresó en una entrevista con Vatican News que el florecer de la nueva comunidad de creyentes lo considera un milagro, teniendo en cuenta la difícil realidad nacional.