El fin de semana pasado, del 23 al 25 de febrero, 30 cristianos fueron asesinados o secuestrados en tres países del mundo. La fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN, por sus siglas en inglés) reportó que en Burkina Faso, Etiopía y Haití se vivió un “oscuro fin de semana de persecución cristiana”.
En la ciudad de Essakane, ubicada en la Diócesis de Dori (Burkina Faso), 15 cristianos fueron asesinados y otros dos fueron heridos por terroristas durante la reunión para la oración dominical del 25 de febrero.
Según información de la diócesis enviada a ACN, 12 de las víctimas murieron en el lugar del ataque y otras 3 fallecieron en un hospital local producto de sus heridas. La Diócesis de Dori pidió oraciones por las víctimas y sus familias, pero también por los perpetradores: