Los obispos católicos del estado mexicano de Guerrero enviaron un mensaje a los miembros del crimen organizado, expresándoles que “nadie tiene derecho a matar, abusar sexualmente, robar, mentir, esclavizar; mucho menos a convertirlo en un negocio o en un medio de intimidación”.
Este pronunciamiento se realizó el 18 de febrero, en el contexto de la difusión del reciente encuentro que sostuvieron los cuatro obispos de la Provincia Eclesiástica de Acapulco con miembros del crimen organizado, en un esfuerzo por buscar la paz en una región azotada por enfrentamientos y muerte.
Los cuatro obispos que se reunieron con los grupos criminales firman el comunicado: Mons. Leopoldo González, Arzobispo de Acapulco; Mons. José de Jesús González, Obispo de Chilpancingo-Chilapa; Mons. Dagoberto Sosa, Obispo de Tlapa; y el Obispo de Ciudad Altamirano, Mons. Joel Ocampo.