FOTOS: Multitudes participaron en marchas provida de San Francisco y Los Ángeles

La lluvia no pudo apagar los corazones que defienden la causa de los no nacidos en California el sábado.

Dos eventos anuales provida, la Walk for Life West Coast (Caminata por la Vida en la Costa Oeste) en San Francisco y OneLife LA en Los Ángeles, atrajeron a multitudes en apoyo de la santidad de la vida humana, a pesar del clima. EWTN transmitió ambos eventos en vivo.

El evento de San Francisco, que celebró su vigésimo año, es organizado y recibe la asistencia en gran medida de católicos, encabezados por el Arzobispo de San Francisco, Mons. Salvatore Cordileone, y muchos sacerdotes y religiosos, entre decenas de miles de participantes. El evento de Los Ángeles está en su décimo año y es organizado por la Arquidiócesis de Los Ángeles. Participan su Arzobispo, Mons. José Gomez, y otros obispos, sacerdotes y religiosos de California, atrayendo a varios miles de defensores de la vida.

Mons. Cordileone comenzó la Caminata por la Vida en la Costa Oeste con una Misa en la Catedral de Santa María, seguida de una campaña de concientización llamada "Silent No More" (No más silencio), con presentadores afectados por el drama del aborto; un mitin con destacados oradores provida, incluida Lila Rose de Live Action; y una caminata de cerca de 3 kilómetros por Market Street hasta Embarcadero Plaza.

En su homilía, el Arzobispo de San Francisco lamentó: "Parece que nuestro estado de California está en una matanza contra la vida en el vientre, con las mujeres más pobres atrapadas en el proceso, atrapadas con recursos insuficientes para tomar una decisión a favor de la vida y acceder a la atención médica y el apoyo emocional y material que necesitan para cuidar de esa nueva vida”.

El prelado luego agradeció a los provida presentes por su apoyo a las mujeres que afrontan embarazos en crisis y continuó: "Cuando se muestra el rostro de Jesucristo a estas hermanas y hermanos nuestros en un encuentro de caridad cristiana, Él hará nuevas todas las cosas para ellos y podrán comenzar a reconstruir sus vidas".

El Arzobispo de San Francisco subrayó que la clave para avanzar en la causa provida y reconstruir la sociedad y promover el Evangelio en la Iglesia es revivir la confianza cristiana en el matrimonio y la familia: "No podemos decir que somos provida a menos que abracemos todo el plan de Dios, lo que significa abrazar su plan para el matrimonio. Si el sentido común no fuera suficiente, tenemos más de 50 años de investigación científica social consistente que nos muestra que muchos de los males sociales que estamos experimentando hoy, como la pobreza desenfrenada, la falta de vivienda, la violencia armada, el encarcelamiento, y demás, son consecuencia de la fragmentación familiar y, en particular, de la falta de padres. Esa es la raíz del problema, lo que significa que el matrimonio, tal como Dios lo diseñó, es la raíz de la solución".

Dirigiéndose a los jóvenes presentes, les animó: "Sean verdaderamente provida siendo parte de la solución, no del problema. Sean la solución: cásense, permanezcan casados y no tengan hijos hasta que estén casados, lo que significa no hacer aquello que trae hijos al mundo hasta que estén casados".

Continuó: "Simplemente no hay forma de tener una sociedad saludable sin una cultura de matrimonio vibrante; la evangelización de la cultura ni siquiera es posible sin una cultura de matrimonio saludable, ya que el pacto de Dios con su pueblo es un pacto matrimonial".

“En una sociedad donde el matrimonio es devaluado e incluso objeto de burla, ¿nos sorprende que el fruto del matrimonio, los hijos, también sea devaluado, desechado y víctima de lo que el Papa Francisco llama la ‘cultura del descarte’?”, cuestionó.

Caminata por la Vida en la Costa Oeste

Los participantes de San Francisco incluyeron a Anna Halsey, graduada en 2021 en la Universidad Franciscana de Steubenville, quien señaló que muchos adultos jóvenes de su parroquia, St. Dominic's en San Francisco, participaron. "Fue genial", aseguró. "Es hermoso ver un testimonio tan fuerte a favor de la vida".

Amber Charles, gerente de formación de The Culture Project, caminó con cuatro misioneros del apostolado católico. Fue la primera vez que la residente de Dallas asistió a la marcha. "A pesar de ser un día lluvioso, no apagó nuestro espíritu", le dijo al National Catholic Register. “Fue una caminata hermosa y asistió mucha gente”.

Robert Byrd se desempeña como coordinador ejecutivo de Pro-Life San Francisco, una organización provida secular, no partidista y sin fines de lucro. Él y Melanie Salazar, directora ejecutiva de Pro-Life San Francisco, lideraron un grupo de participantes y atendieron un stand en la feria de información del evento. Admitió que la intensa lluvia hizo que el evento de este año fuera un desafío, pero dijo: "Siempre es un buen momento pasar tiempo con amigos que reconocen el valor de cada vida humana y conocen la verdad sobre lo que es el aborto".

Salazar dijo que estaba contenta de participar “para recordar a los niños asesinados por el aborto cada año, celebrar el éxito que ha logrado el movimiento provida y disfrutar de la camaradería de personas provida con mentalidad similar”.

Lisa Hamrick también es feligrés de la histórica iglesia de Santo Domingo y ha sido organizadora de la marcha desde su inicio, en 2004. Se maravilló del crecimiento de la marcha, señalando que el primer año comenzó con 7.500 participantes.

En esa ocasión además, tuvieron a unos 3.000 manifestantes contrarios a los provida.

“Los manifestantes estaban enojados, gritando, maldiciendo y haciendo todo lo posible para perturbarnos, mientras que nuestro lado estaba feliz, pacífico y en oración", recordó. "Realmente se podía ver la diferencia".

Un año, una mujer con aspecto enojado miró fijamente a Hamrick y se acercó a ella. “Me estaba preparando para que empezara a gritarme, pero para mi sorpresa, dijo: 'Antes me oponía a ustedes, pero por primera vez estoy caminando con ustedes este año'. Así que, si cambiamos solo unos pocos corazones como el suyo, nuestros esfuerzos valen la pena”, expresó.

Cameron Gibson, estudiante de último año en la Escuela Secundaria Archbishop Riordan en San Francisco, es fundador y presidente del grupo provida de la escuela, Crusaders for Life. Fue acompañado por Angelo Depaoli, vicepresidente del club, y otros cuatro estudiantes mientras ayudaban a llevar una pancarta frente a los caminantes. Fue la tercera vez en la que ambos participaron.

“Fue emocionante, y Angelo y yo incluso fuimos entrevistados por EWTN”, dijo Gibson. “A pesar del mal tiempo, la multitud fue tan grande como el año pasado”.

Gibson explicó que fundó el club por sugerencia de un profesor, y señaló: “Es trágico cómo el aborto se ha vuelto aceptado en nuestra sociedad. Mucha gente parece no valorar la vida”.

Depaoli agregó que es importante para él mostrar apoyo a la causa porque fue concebido fuera del matrimonio y sus padres “podrían haber tomado el camino fácil” y abortarlo, pero eligieron la vida.

Como subrayó la líder provida Lila Rose: “La ideología proaborto, la ideología antinatalista no tiene futuro. Inevitablemente se autodestruye; implosiona ante la presencia de la vida humana hermosa, próspera, generosa y abundante”.

OneLife LA

OneLife LA comenzó en La Placita/Olvera Street, en el centro de Los Ángeles, con la marcha avanzando hacia el Parque Histórico Estatal de la ciudad, para una celebración que incluyó oradores y música en vivo. El día concluyó con una Misa de réquiem celebrada por Mons. Gomez por los no nacidos, en la Catedral de Nuestra Señora de los Ángeles.

Al dar la bienvenida a los participantes, el Arzobispo de Los Ángeles dijo: “OneLife LA siempre ha sido más que un hermoso día, ¡especialmente hoy, que está lloviendo! OneLife LA es una visión de una nueva forma de vivir una cultura de la vida, una sociedad donde cada vida es sagrada y cada vida es cuidada, cada vida en cada etapa y en cada condición, desde el momento en que una persona es concebida en el vientre hasta que la vida de la persona llega a su fin natural”.

Luego expresó: “Cada vida humana es preciosa para Dios; por el amor de Dios, estamos llamados a amar. Por el amor de Dios, estamos llamados a proteger. Esta es una hermosa visión para OneLife LA”.

Ellie Cabildo llegó con miembros de su parroquia, San Pedro y San Pablo en Alta Loma. Para ella, participar en OneLife LA es como una peregrinación, en la que combina caminar con rezar por la vida. También lo ve como un buen ejemplo para sus hijos.

“Creo en el plan de Dios para el amor, el matrimonio y la familia”, le dijo al Register. “Estar aquí en OneLife LA es una hermosa manera de demostrar ese apoyo y obedecer lo que creo que Dios me está llamando a hacer".

Erick Rubalcava tocó el teclado como parte de una banda de alabanza y adoración en el evento. “Ha sido maravilloso verlo crecer a lo largo de los años”, expresó. “Comenzamos siendo un puñado de personas caminando alrededor del Dodger Stadium y hemos crecido a ser muchos miles hoy”.

Para Rubalcava, el evento de este año fue “un poderoso testimonio a favor de la vida, alentando a las personas a respetarla, desde el vientre hasta la tumba”.

Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en el National Catholic Register.