Nuestra Señora de Guadalupe. | Crédito: Basílica Guadalupe
En los últimos días, a través de redes sociales, se viralizó un video en el que se ve a un pastor evangélico destrozando una imagen de Nuestra Señora de Guadalupe durante una de sus predicaciones.
El protagonista es el pastor Kevin T. Wynne, de la “Iglesia Bautista Monte Sión”, ubicada en Iztapalapa, al oriente de la capital mexicana.
En el video, se observa además cómo el pastor destruye una imagen del culto satánico a la “Santa Muerte”.
🇲🇽✝️🇻🇦 Controversy in Mexico after a Pastor from the Monte Sion Baptist Church, in Tamaulipas, Mexico before the faithful of the Church decided to gather an image of the Virgin of Guadalupe, patron saint of Mexico for Roman Catholics and the image of "Santa Muerte", pic.twitter.com/8Cx2VQN8Vm
— NATO🇺🇸 VS KREMLIN🇷🇺 (@eduinfotech101) January 6, 2024
La Virgen de Guadalupe, advocación mariana a la que la Iglesia Católica reconoce como la “Emperatriz de América”, goza de amplia devoción tanto en México como en todo el continente. Cada año, tan sólo en los primeros días de diciembre, su santuario en Ciudad de México recibe a más de 10 millones de peregrinos que visitan el templo.
En medio de la indignación que se ha extendido en redes sociales, el P. Hugo Valdemar, sacerdote de la Arquidiócesis Primada de México, instó a los católicos a no “odiar a los sacrílegos”. En cambio, invitó a los fieles católicos a “pedir a Jesús y María por su conversión, para que liberen a estos pastores fanáticos del odio satánico del que están poseídos”.
Para el P. Valdemar, que por más de 15 años fue director de Comunicaciones de la Arquidiócesis de México, la reacción del pastor protestante “viene inspirada por Satanás, que aborrece todo lo que es sagrado, y especialmente tiene un odio perverso a la Virgen María”.
“Viendo al pastor destruir la imagen de la Virgen se percibe que está movido por Satanás; actúa como instrumento de su odio”, señala.
En declaraciones a ACI Prensa, el sacerdote calificó el acto de “intolerancia disfrazada de un celo iconoclasta que es totalmente irracional”.
“Los católicos sólo adoramos a Dios”, explicó, señalando luego que “la Virgen Santísima y los santos nos merecen una especial consideración por su vida ejemplar y de piedad”.
“Los invocamos como intercesores ante Nuestro Señor, pero ellos no son Dios ni hacen milagros, son parte de la Iglesia triunfante que están en el cielo e interceden por nosotros”, aclaró el P. Valdemar.
El sacerdote mexicano advirtió que “confundir una imagen sagrada con un ídolo es una herejía que hace ya muchos siglos fue condenada por la Iglesia Católica”.
La plataforma mexicana Actívate lanzó una campaña en su sitio web, denunciando que “la intolerancia religiosa ha alcanzado niveles alarmantes en nuestra sociedad”.
“La Virgen de Guadalupe es un símbolo profundamente arraigado en la fe católica, y la profanación de esta imagen no sólo es una afrenta a la religión, sino también a los valores de respeto mutuo que todos debemos defender”, añade Actívate.
La destrucción de la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe, indica, “va en contra de los principios fundamentales de respeto y tolerancia que deben prevalecer entre las diversas creencias religiosas en nuestro país”.
La campaña de firmas va dirigida a la Secretaría de Gobernación de México, a la que exigen “tomar medidas concretas contra el pastor Kevin T. Wynne”. De acuerdo con el artículo 8 de la Ley de Asociaciones Religiosas de México, estas deben “respetar en todo momento los cultos y doctrinas ajenos a su religión”.
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Las enseñanzas de la Iglesia Católica sobre la Virgen María y la Eucaristía fueron los dos mayores obstáculos para la exprotestante LyLena Estabine, de 21 años, a la hora de aceptar la fe católica.
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