Los 51 sacerdotes de una prelatura agradecen al obispo su mensaje sobre Fiducia supplicans

Por Walter Sánchez Silva

4 de enero de 2024

Ene 4, 2024

Los 51 sacerdotes de la Prelatura de Moyobamba, en la Amazonía del Perú, publicaron una carta en la que agradecen “en total unanimidad” y “sin fisuras” el mensaje de su obispo, Mons. Rafael Escudero López Brea, sobre la declaración del Vaticano Fiducia supplicans, respecto a la posibilidad de bendecir a parejas del mismo sexo y en situaciones irregulares.

“En total unanimidad, sin fisuras, la cincuentena de sacerdotes que trabajamos actualmente en la Prelatura de Moyobamba acatamos, suscribimos y agradecemos el mensaje pastoral de nuestro Obispo Prelado, Monseñor Rafael Escudero López-Brea”, respecto a la mencionada declaración, señala un texto publicado en el sitio web de la Prelatura el 2 de enero.

“Ninguno de nosotros hemos negado jamás una bendición, aún más, ni siquiera la absolución sacramental o la sagrada comunión a ninguna persona que se haya acercado a implorar los auxilios de la Iglesia con una mínima contrición y propósito de la enmienda, en comunión con la enseñanza ininterrumpida de la Santa Iglesia de Dios”, prosigue la carta.

El texto es la respuesta de acogida de los 51 sacerdotes de la Prelatura de Moyobamba, tras el mensaje pastoral del Obispo Prelado del mismo día, en el que señaló: “el día de mi ordenación episcopal juré solemnemente ‘preservar el depósito de la fe en la pureza y la integridad, de acuerdo con la Tradición siempre y en todas partes observada en la Iglesia desde la época de los Apóstoles’”.

“Por eso, amonesto a los sacerdotes de la Prelatura de Moyobamba a no realizar ninguna forma de bendición de parejas en situación irregular ni a parejas del mismo sexo”, agregó Mons. Escudero.

En su mensaje, el Prelado resaltó que Fiducia supplicans —declaración publicada por el Dicasterio para la Doctrina de la Fe el 18 de diciembre— “daña la comunión de la Iglesia, pues tales bendiciones contradicen directa y seriamente la Divina Revelación y la doctrina y práctica ininterrumpida de la Iglesia Católica, incluido el magisterio reciente del Papa Francisco, por eso no hay citas en toda la Declaración que se apoyen en el magisterio anterior”.

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“Ante la confusión y perplejidad que ha provocado la declaración”, los 51 sacerdotes de Moyobamba suplican “al Santo Padre, el Papa Francisco, a quien reconocemos como Obispo de Roma y Sucesor de Pedro, que anule la validez del documento y toda afirmación que permita la administración de sacramentos o bendiciones a personas en pecado mortal objetivo sin arrepentimiento y deseo de conversión”.

Los presbíteros precisan luego: “que nadie piense que este mensaje nos sitúa en rebeldía, como lo están aquellos obispos y sacerdotes, especialmente de Europa central y norte, que desobedecen desde hace años, sin ningún recato, las enseñanzas de la Iglesia en la verdad y en la caridad mediante la administración ilícita y sacrílega de los sacramentos de Dios y abusando de su misericordiosa bendición”.

“No pocos, además, propagan sin esconderse su pretensión de cambiar la Doctrina y la Moral secular de la Iglesia. Eso sí es rebeldía contra Dios, contra el Papa y contra el pueblo fiel”, prosigue.

Para concluir, los sacerdotes aseguran que su mensaje porta “el sincero deseo de ayudar filialmente al Santo Padre en su misión de guiar al Pueblo Santo de Dios como tantas veces nos ha pedido. Cuenta todos los días con nuestra oración”.

Walter Sánchez Silva
Soy esposo desde 2008. Con mi esposa tenemos tres hijos aquí y uno que se fue al cielo en 2023, antes de nacer. Desde que me incorporé a ACI Prensa en 2005, he tenido la oportunidad de cubrir diversos eventos de la Iglesia Católica. Entre ellos, las Jornadas Mundiales de la Juventud en Colonia, Madrid y Río de Janeiro y los viajes apostólicos del Papa Benedicto XVI a México y del Papa Francisco a Corea del Sur. He sido enviado al Vaticano para cubrir los sínodos de la Familia, en 2015; de la Amazonía, en 2019 y el de la Sinodalidad, en 2023. Sigo de cerca la situación de la Iglesia Católica en Nicaragua, que sufre la persecución de la dictadura de Daniel Ortega, así como la actualidad eclesial en la región.