El Papa Francisco reiteró hoy su dolor por el sufrimiento causado por las guerras en el mundo, al tiempo que manifestó su cercanía a los cristianos en Nigeria tras la masacre de casi 200 personas en el fin de semana de Navidad.
“Desgraciadamente, la celebración de la Navidad en Nigeria estuvo marcada por graves actos de violencia en el estado de Plateau, que causaron numerosas víctimas. Rezo por ellos y sus familias. ¡Que Dios libre a Nigeria de estos horrores!”, expresó el Santo Padre, tras concluir el rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro del Vaticano.
Cerca de 200 cristianos fueron asesinados entre el 23 y el 26 de diciembre en diversas comunidades de Nigeria, en un ataque atribuido a los violentos pastores musulmanes ‘fulani’.