En una carta abierta, los fieles de la Prelatura de Marajó, en el estado brasileño de Pará, afirmaron que "la toma de posesión del nuevo obispo", Mons. José Ionilton, "con participación y adhesión popular puede estar seriamente comprometida".

Según ellos, "la revocación de la prohibición de permanencia" del Obispo Emérito de Marajó, Mons. José Azcona, "en suelo marajoara es condición sine qua non para que" el "pueblo marajoara y todos los que lo respetan" puedan "superar este trauma inicial y brindar al nuevo obispo un sentimiento de bienvenida y adhesión colectiva".

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En un comunicado publicado el sábado 9 de diciembre, firmado por su administrador, el P. Kazimierz Antoni Skorki, la Prelatura de Marajó informó que el Nuncio Apostólico en Brasil, Mons. Giambattista Diquattro, llamó a Mons. Azcona para informarle que ya no podía residir en el territorio de la prelatura, sin especificar los motivos de esta decisión.

Según el periódico O Liberal, Mons. Azcona debe abandonar Marajó antes de enero, cuando asume el cargo el nuevo obispo, Mons. José Ionilton Lisboa, nombrado por el Papa Francisco el 3 de noviembre.

Desde el anuncio hecho de la prelatura, los fieles se han expresado en redes sociales y en diferentes lugares de la prelatura, pidiendo que el obispo emérito se quede.

Cientos de marajoaras firmaron una "Carta de repudio a la salida del obispo emérito de la Prelatura de Marajó, Mons. José Luís Azcona Hermoso". La carta está dirigida "a los sacerdotes de la Prelatura de Marajó". Está fechada el 10 de diciembre y fue divulgada el 13 de diciembre por la prensa local.

Los firmantes afirman que, "como Iglesia en Marajó", fueron "sorprendidos por la abrumadora noticia" de que Mons. Azcona "estaba siendo ordenado a dejar nuestra tierra, nuestra gente, nuestras luchas por la salvación y por mejores condiciones de vida". Destacan que al obispo emérito se le está "atribuyendo" la "condición inexplicable y absurda de ser penalizado, sin juicio o análisis previo, a una condición de ostracismo".

"Están decidiendo, a través de una llamada telefónica irrespetuosa, sobre la vida de monseñor Azcona, prohibiéndole quedarse en la tierra que abrazó y que, como pocos, ama tanto".

Los fieles cuestionan "qué grave delito habría cometido monseñor Azcona para ser castigado de esta manera tan radical y cruel".

"Por el bautismo, el hombre se incorpora a la Iglesia de Cristo y se constituye en persona con los deberes y derechos que, de acuerdo con su condición, son propios de los cristianos, siempre que permanezcan en comunión eclesiástica, a menos que una sanción legítimamente impuesta lo impida (Cán. 96). Siendo entonces monseñor Azcona, bautizado y en comunión eclesiástica permanente, no sólo por la condición de obispo, sino sustancialmente por su historia de vida y testimonio de fe, una persona con deberes y derechos, ¿qué derecho se le está concediendo?" preguntan.

Los fieles enfatizan que, "para la validez de un acto, se requiere que se verifiquen los elementos que lo constituyen esencialmente, así como las solemnidades y requisitos exigidos por el derecho para la validez del acto (Can. 124 - § 1)". "No somos testigos de la aplicación de estos derechos, sino testigos de una condena oscura, injusta y sin precedentes", expresan.

Los fieles también mencionan un audio atribuido a Mons. José Ionilton supuestamente dirigido a los laicos, divulgado por los medios de comunicación locales y, según ellos, "publicado hoy [10 de diciembre] en las celebraciones en todo Marajó".

En el audio, el obispo electo de la Prelatura de Marajó, aseguran los firmantes, "dijo: 'Pensé que no sería conveniente un cambio ahora, especialmente en este momento en que se acerca la fecha en que comenzaba mi servicio en la prelatura... y tampoco era adecuado hacerlo ahora...'".

Se manifiestan además "absolutamente en contra de esta decisión sumaria de prohibir la permanencia de monseñor Azcona en suelo marajoara", al entender "este acto como injusto, contrario al testimonio de la fe cristiana, al catecismo de la Iglesia y como un contra-testimonio de amor al prójimo".

Los fieles también señalan que Mons. José Azcona habría sido prohibido por el Arzobispo de Belém, Mons. Alberto Taveira, de celebrar Misas en esa diócesis.

"Recordamos con nostalgia las ceremonias celebradas en la basílica de Nuestra Señora de Nazaré y damos testimonio de la condición de este templo, completamente lleno para escuchar la predicación de nuestro obispo. De manera incomprensible, también este derecho le es negado a través de una determinación del señor arzobispo de la capital paraense que, en un acto de contra-testimonio, falta de ejercicio de la humanidad, de fraternidad, de comprensión y de diálogo, le prohíbe presidir la celebración de misas en Belém, desconsiderando integralmente lo que de destacó en el Concilio Vaticano II, cuando afirma que Cristo hizo de los obispos sucesores de los apóstoles, participantes de su propia consagración y misión. ¿Qué pecado abominable cometió monseñor José para sufrir tan absurda pena?" cuestionan.

Al responder sobre si era verdad la prohibición de que Mons. Azcona celebre Misas en Belém, desde cuándo y por qué motivos, su oficina de prensa indicó que "la Arquidiócesis de Belém no hablará sobre el asunto, ya que se trata de otra prelatura".

Mons. José Luís Azcona nació en Pamplona (España), el 28 de marzo de 1940. Es religioso de la Orden de los Agustinos Recoletos. Llegó a Brasil en 1985. Fue Obispo de la Prelatura de Marajó desde 1987 hasta 2016. A pesar de su renuncia, continúa viviendo en la isla del estado de Pará.

En 2009, denunció casos de pedofilia y explotación sexual de niños y adolescentes en Marajó por políticos y empresarios locales. La denuncia dio origen a la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) sobre la Pedofilia en la Asamblea Legislativa de Pará y en el Congreso Nacional.

En 2019, en el contexto del Sínodo de la Amazonía, fue una de las voces conservadoras que se pronunciaron. El obispo emérito no participó en el Sínodo en el Vaticano, pero publicó diversos artículos con críticas al Instrumentum laboris y al documento final.

También alertó sobre el escándalo y la idolatría causados por el uso de imágenes de Pachamama en eventos en el Sínodo de la Amazonía. Una de las críticas se hizo el 27 de octubre de 2019, durante la misa en la basílica de Nuestra Señora de Nazaré, en Belém.

Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en ACI Digital.