El martes, el gobierno de Armenia informó que la gran mayoría de los pobladores de etnia armenia que se hallaban en la región de Nagorno-Karabaj han abandonado su tierra ancestral en las últimas dos semanas, tras una violenta toma de control por parte de Azerbaiyán.
Según el gobierno armenio, 100.617 refugiados de Nagorno-Karabaj —de una población de 120,000— han sido “desplazados forzosamente”. Además, señala que actualmente 345 refugiados están recibiendo atención médica y que “muchos de ellos se encuentran en estado crítico o extremadamente crítico”.
Mientras tanto, el lunes 2 de octubre, un pequeño enfrentamiento militar cerca de la frontera entre Armenia y Azerbaiyán evidenció aún más las crecientes tensiones entre estas dos naciones vecinas.