Erigida en la cima de una colina que se alza majestuosamente sobre la ciudad portuaria de Marsella, Notre Dame de la Garde emerge como un faro de fe, un símbolo de la devoción religiosa y un testimonio de la rica historia de Francia.
Esta imponente basílica dedicada a Nuestra Señora de la Guardia —considerada a partir de la Edad Media la guardiana de la gente de mar y pescadores— se sitúa a más de 160 metros sobre el nivel del mar y ha sido un lugar de peregrinación y reflexión durante más de 800 años.
El viernes 22 de octubre de 2023, después de ser recibido por el presidente francés, Emmanuel Macron, el Papa Francisco se dirigirá a esta basílica para una ceremonia en compañía del clero de Marsella. Luego se acercará a un memorial para pronunciar un discurso dedicado a los marineros y migrantes desaparecidos en el mar.