Sínodo de la Sinodalidad: Los participantes del Sínodo de la Amazonía que vuelven a Roma

El Sínodo de la Sinodalidad se realizará en el Vaticano el próximo mes de octubre. De los más de 360 participantes, alrededor de una treintena participó en el Sínodo de la Amazonía en 2019. ¿Qué piensan algunos de estos padres sinodales?

La primera fase del Sínodo de la Sinodalidad se inauguró en octubre de 2021. Al final de las etapas diocesanas y continentales se llevarán a cabo dos sesiones en el Vaticano: la primera, del 4 al 29 de octubre de 2023, y la segunda en octubre de 2024. El lema de la Asamblea es: “Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”. 

Hace 4 años, el ahora Cardenal Jean-Claude Hollerich, Arzobispo de Luxemburgo, hizo parte del Sínodo de la Amazonía como miembro de nombramiento pontificio, lo que quiere decir que fue designado por el Papa Francisco.

Para este Sínodo sobre la Sinodalidad, el Purpurado jesuita ha sido elegido como Relator General de la Asamblea. Entre sus funciones están exponer el tema, ilustrar el documento de trabajo, señalar los puntos para el diálogo y supervisar la preparación del documento final.

El 29 de marzo de 2023, en una extensa entrevista concedida al medio católico croata Glas Koncila, el Cardenal Hollerich señaló: “Con el tiempo” el Papa podría permitir la ordenación sacerdotal de mujeres.

El Purpurado respondió así a una pregunta sobre si el actual Pontífice puede decidir algo contrario a lo que escribió San Juan Pablo II en la carta apostólica Ordinatio sacerdotalis, que define que el sacerdocio ministerial está reservado sólo a los hombres y que la Iglesia no tiene potestad para cambiar esto.

"Sobre la ordenación de mujeres en la Iglesia Católica, la última palabra clara fue pronunciada por San Juan Pablo II, y esta permanece", señaló el Papa Francisco en la rueda de prensa durante el viaje de retorno de Suecia a Roma, en noviembre de 2016.

En la misma entrevista de marzo de este año, el Cardenal Hollerich se refirió a la doctrina católica sobre las personas que experimentan atracción por el mismo sexo: “La parte de la enseñanza que llama a la homosexualidad ‘intrínsecamente desordenada’ me parece un poco dudosa. Aún así, tenemos que aceptar a todas las personas y hacerles sentir el amor de Dios. Si lo sienten, estoy seguro de que algo cambiará en su corazón”, señaló.

La enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad está contenida en los numerales 2357, 2358 y 2359 del Catecismo de la Iglesia Católica. El primero establece: “La Tradición ha declarado siempre que ‘los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados’ (Congregación para la Doctrina de la Fe, Decl. Persona humana, 8). Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso”.

“Un número apreciable de hombres y mujeres presentan tendencias homosexuales profundamente arraigadas. Esta inclinación, objetivamente desordenada, constituye para la mayoría de ellos una auténtica prueba. Deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta. Estas personas están llamadas a realizar la voluntad de Dios en su vida, y, si son cristianas, a unir al sacrificio de la cruz del Señor las dificultades que pueden encontrar a causa de su condición”, indica el numeral 2358.

Otro de los padres sinodales que tomará parte en el Sínodo de la Sinodalidad es el Cardenal Robert Walter McElroy, Obispo de San Diego (Estados Unidos). El Purpurado también participó en el Sínodo de la Amazonía por nombramiento pontificio, es decir, elegido directamente por el Papa. Como en el caso de Hollerich, no era Cardenal en 2019.

El Purpurado estadounidense ha hablado en varias ocasiones sobre el debate de la "coherencia eucarística", afirmando que la Comunión no debe negarse a los políticos que apoyan la legalización del aborto.

Además, a menudo ha criticado lo que considera la elevación del aborto como una prioridad sobre otras preocupaciones sociales, como la pena de muerte, el cuidado de los migrantes y el medio ambiente.

El canon 915 del Código de Derecho Canónico, la ley que regula a la Iglesia universal, establece que “no deben ser admitidos a la Sagrada Comunión” aquellos “que obstinadamente persistan en un manifiesto pecado grave". En la enseñanza de la Iglesia el aborto lo es, así como el apoyo formal y explícito a esta práctica que tiene como objetivo acabar con la vida de un no nacido.

En una carta enviada en 2004 a los obispos de Estados Unidos, el entonces Cardenal Joseph Ratzinger, luego Papa Benedicto XVI, escribió: “Respecto del grave pecado del aborto o la eutanasia, cuando la cooperación formal de una persona es manifiesta (entendida, en el caso de un político católico, como hacer campaña y votar sistemáticamente por leyes permisivas de aborto y eutanasia), su párroco debería reunirse con él, instruirlo respecto de las enseñanzas de la Iglesia, informándole que no debe presentarse a la Sagrada Comunión hasta que lleve a término la situación objetiva de pecado, y advirtiéndole que de otra manera se le negará la Eucaristía”.

En octubre de 2019, tras la conclusión del Sínodo de la Amazonía, el entonces Mons. McElroy le indicó al National Catholic Reporter que está a favor de ordenar mujeres como diaconisas. "Mi opinión al respecto es [que] las mujeres deberían ser invitadas a todos los ministerios o actividades que tengamos que no estén doctrinalmente excluidas", afirmó.

La Comisión para el Estudio del Diaconado Femenino fue instaurada por primera vez por el Papa Francisco en agosto de 2016. En mayo de 2019, el Santo Padre indicó que no temía estudiar más el asunto, “pero hasta este momento no va". En abril de 2020, el Pontífice estableció una nueva Comisión para revisar el tema.

El Cardenal Oswald Gracias, Arzobispo de Bombay (India), es otro de los participantes en el Sínodo que también estuvo en el de la Amazonía en 2019. En aquella oportunidad, el Purpurado se refirió al papel de la mujer en la Iglesia.

“El derecho canónico, la ley de la Iglesia, permite todo, excepto que las mujeres no pueden escuchar confesiones, no pueden celebrar la Misa y no pueden dar [el sacramento] de la Confirmación, pero prácticamente todo lo demás sí".

"En una parroquia tiene que haber un sacerdote para escuchar las Confesiones, pero las mujeres pueden estar a cargo de una parroquia de acuerdo con el derecho canónico. Está permitido. El derecho dice una 'persona', el obispo puede poner una 'persona'”, agregó.

El canon 517 señala que “si, por escasez de sacerdotes, el Obispo diocesano considera que ha de encomendarse una participación en el ejercicio de la cura pastoral de la parroquia a un diácono o a otra persona que no tiene el carácter sacerdotal, o a una comunidad, designará a un sacerdote que, dotado de las potestades propias del párroco, dirija la actividad pastoral”.

El Cardenal Pedro Barreto Jimeno, Arzobispo de Huancayo (Perú), participó en el Sínodo de la Amazonía como presidente delegado y en su calidad de vicepresidente de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM), organización que tuvo un papel preponderante en aquella ocasión.

Durante la realización del Sínodo de la Amazonía, la REPAM recibió diversas críticas por algunos eventos como la ceremonia del 4 de octubre en los Jardines Vaticanos con el Papa Francisco, los "momentos de espiritualidad amazónica" en la iglesia Santa María en Traspontina, y el "Vía Crucis Amazónico" del día 19.

En mayo de 2018, poco antes de ser creado Cardenal, Barreto aseguró que el enfoque de género dignifica al hombre y a la mujer.

Entrevistado por Ideeleradio, el entonces Mons. Barreto indicó: "La Iglesia tiene unos principios y unos valores irrenunciables y habla de una dignificación del papel de la mujer en todo campo de acción y, en ese sentido, tenemos que ser conscientes de que no va ser fácil este enfoque de género, que me parece lo más adecuado para dignificar tanto al hombre y a la mujer, cada uno en su propio rol".

Consultado por su opinión sobre "aquellos que dicen que luchar por la igualdad es tener una ideología de género y no un enfoque de género", el Arzobispo de Huancayo manifestó: "Hay sectores —yo diría no muy grandes— que en la sociedad, en la economía, en la política, e incluso en la Iglesia, que tienen posiciones que responden a intereses de grupo, y cuando los intereses de grupo inciden en el bien común, ahí vienen las distorsiones".

La ideología de género es una corriente —condenada en distintas ocasiones por el Papa Francisco— que considera que el sexo biológico no es determinante para la persona, sino que ella puede definir su orientación e identidad sexual de acuerdo a sus preferencias e incluso en contra de su naturaleza.

En mayo de 2021, el Purpurado jesuita suscitó polémica por unas declaraciones que fueron interpretadas como un apoyo a Pedro Castillo, candidato a la Presidencia del Perú y acusado de tener vínculos con el terrorismo comunista de Sendero Luminoso.

Entrevistado por el periodista Nicolás Lúcar en Radio Exitosa el 18 de mayo, el Cardenal Barreto criticó los video-mensajes realizados por futbolistas que han integrado la selección peruana, en los que rechazaron el comunismo, alentaban a mantener la unidad en el país y votar por la democracia y la libertad.

El Cardenal indicó que si bien "cada ciudadano tiene libertad para expresar su posición política", pidió que los deportistas peruanos "no saquen la cara teniendo como emblema la sagrada blusa del Perú". "Esto sí me parece es una utilización política que hay que reprobar", añadió.

Mauricio López Oropeza en 2019 era Secretario Ejecutivo de la REPAM. En un artículo publicado en octubre de ese año en el que defendió el documento de trabajo del Sínodo de la Amazonía —duramente criticado por la "visión distorsionada del llamado rostro amazónico", la "interculturalidad" y la promoción de la ordenación de hombres casados— señaló que “algunos elementos de la doctrina (…) pensados para la Amazonía, requerirán cambios reales a la luz de un sincero discernimiento sinodal”.

El P. Antonio Spadaro, sacerdote jesuita y ahora exdirector de la revista La Civiltà Cattolica por su nombramiento como subsecretario del Dicasterio para la Educación y la Cultura en el Vaticano, asistió en 2019 como miembro de nombramiento pontificio y tomará parte en el Sínodo de la Sinodalidad en esa misma condición.

El sacerdote italiano, uno de los más cercanos colaboradores del Papa Francisco, publicó en 2017 un artículo sobre una alianza "sorprendente" entre católicos conservadores y evangélicos en los Estados Unidos en temas como la inmigración, sugiriendo que estaría en oposición al mensaje de misericordia del Santo Padre.

En el texto redactado a cuatro manos con el protestante Marcelo Figueroa, que escribe en el diario del Vaticano L’Osservatore Romano, se señala: “La erosión de la libertad religiosa es claramente una grave amenaza dentro de un secularismo extendido". Y añaden: "Pero debemos evitar que su defensa venga en los términos fundamentalistas de una 'religión en total libertad', percibida como un desafío virtual directo a la laicidad del Estado".

A continuación, los autores describen lo que llaman un "ecumenismo fundamentalista" que se desarrolla entre fundamentalistas evangélicos e "integristas católicos", y que unen "por el mismo deseo de influencia religiosa en la esfera política". “Ambos, evangélicos y católicos integristas condenan el ecumenismo tradicional y promueven un ecumenismo de conflicto que los une en el sueño nostálgico de un tipo de Estado teocrático", agregan.

El P. Adelson Araújo Dos Santos es un sacerdote brasileño nacido en Manaos, en la región amazónica del país con más católicos del mundo. Ingresó a la Compañía de Jesús siendo ya abogado. Tiene un Doctorado en Teología y enseña en la Pontificia Universidad Gregoriana, en la Facultad de Teología y el Instituto de Espiritualidad. En el Sínodo de la Amazonía sirvió como experto y en el de la Sinodalidad hace parte de la comisión de espiritualidad. Ha participado, además, en la redacción del documento de trabajo.

En un artículo publicado en La Civiltà Cattolica en julio de 2020, el sacerdote asegura: “La espiritualidad indígena de los pueblos originarios de la Amazonía tiene una contribución enorme que hacer al cristianismo, en memoria y confirmación de lo que nuestra espiritualidad enseña sobre el modo en que debemos tratar la creación divina, pero también respecto de una nueva visión ecológica del mundo por medio del concepto de ‘buen vivir’”.

El P. Agenor Brighenti es un sacerdote brasileño exponente de la teología de la liberación, que participó en 2019 como presidente del Instituto Nacional de Pastoral de la Conferencia Episcopal de Brasil y Miembro del Equipo de Reflexión Teológica del CELAM (Brasil). En el Sínodo del próximo octubre hará parte del grupo de expertos y animadores.

En una entrevista con Religión Digital en 2019, el sacerdote consideró: “Francisco nos anima, nos inspira y nos lanza, porque está haciendo la reforma pendiente del Concilio, tras tres décadas de involución eclesial o de noche oscura, que se prolongó hasta la renuncia de Benedicto XVI”.

Sor María Luisa Berzosa González, religiosa española radicada en Argentina, no sólo estuvo en el Sínodo de la Amazonía en 2019, sino también en el de los jóvenes en 2018.

En junio de 2019 afirmó en una entrevista: “Yo vengo pensando que el celibato, una condición valiosísima para el presbítero y para la Iglesia, no puede imponerse y no debe estar condicionada para el sacerdocio. Creo que debe ser optativo, como ha sido en otras épocas”.

El canon 277 del Código de Derecho Canónico, que rige a la Iglesia universal de rito latino, establece: “Los clérigos están obligados a observar una continencia perfecta y perpetua por el Reino de los cielos y, por tanto, quedan sujetos a guardar el celibato, que es un don peculiar de Dios mediante el cual los ministros sagrados pueden unirse más fácilmente a Cristo con un corazón entero y dedicarse con mayor libertad al servicio de Dios y de los hombres”.

En la misma entrevista con Religión Confidencial, la religiosa indicó que no le gustaría ser ordenada sacerdote, aunque comentó que estuvo “muy apenada” cuando se cerró en el Vaticano la comisión que estudiaba el diaconado de las mujeres. "Quiero pensar que este es un asunto que todavía puede debatirse", agregó.

La religiosa colombiana Gloria Franco Echeverri era en 2019 presidente de la Confederación Latinoamericana de los Religiosos (CLAR).

“En la dinámica sinodal de la Iglesia la Vida Consagrada femenina tiene aspiraciones loables, que no surgen de una ambición de poder o un sentimiento de inferioridad, tampoco de una búsqueda egolátrica de reconocimiento, brotan de un deseo de vivir en fidelidad al proyecto de Dios, que mira a su pueblo y le otorga dignidad de hermanos. La aspiración es a la participación y a la corresponsabilidad en los discernimientos y en la toma de decisiones. Que se abran cauces reales para acoger la contribución femenina”, indicó en una entrevista con ADN Celam en marzo de este año.

El documento final del Sínodo de la Amazonía tuvo una mayoritaria aprobación de los tres temas más polémicos: la propuesta de ordenar hombres casados recibió 128 votos a favor y 41 en contra; la posibilidad de ordenar diaconisas tuvo 137 votos a favor y 30 en contra; mientras que la creación de un “rito amazónico” tuvo 140 votos a favor y 29 en contra.

Los otros participantes del Sínodo de la Amazonía que estarán en el Sínodo sobre la Sinodalidad son:

Cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano.

Cardenal Michael Czerny, S.J., prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral.

Cardenal João Braz De Aviz, prefecto del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica.

Cardenal Kevin Joseph Farrell, prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida.

Cardenal Kurt Koch, prefecto del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos.

Cardenal Christoph Schönborn, O.P., Arzobispo de Viena, presidente de la Conferencia Episcopal (Austria).

Cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, S.D.B., Arzobispo Emérito de Tegucigalpa (Honduras).

Cardenal Seán Patrick O'Malley, O.F.M. Cap., Arzobispo de Boston (Estados Unidos de América).

Cardenal Fridolin Ambongo Besungu, Arzobispo de Kinshasa (República Democrática del Congo).

Cardenal Marcello Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos.

Mons. Salvatore Fisichella, pro-prefecto del Dicasterio para la Evangelización - Sección para las Cuestiones Fundamentales de la Evangelización en el Mundo.

Mons. Marco Mellino, Secretario del Consejo de Cardenales.

Mons. Paul Richard Gallagher, Secretario de la Sección para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales (Vaticano).

Mons. Héctor Miguel Cabrejos Vidarte, Arzobispo de Trujillo (Perú).

Mons. José Luis Azuaje Ayala, Arzobispo de Maracaibo (Venezuela).

Mons. Óscar Vicente Ojea, Obispo de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina.

P. Giacomo Costa, S.J. (Italia), Secretario especial.

P. Carlos Maria Galli (Argentina).

P. Ambrose Ivan Samus.

P. Justo Ariel Beramendi Orellana.

P. Giuseppe Bonfrate (Italia).

Sor Daniela Adriana Cannavina, C.M.R. (Colombia).

Dr. Paolo Ruffini, prefecto del Dicasterio para la Comunicación.

Dr. Alfonso Salvatore Cauteruccio.