La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) saludó el inicio del cese al fuego entre las fuerzas de seguridad y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) e instó a seguir trabajando para llegar al final de las hostilidades, que durante cerca de seis décadas han afectado al país.
Ayer 3 de agosto comenzó el cese al fuego bilateral, nacional y temporal, entre el gobierno colombiano y el ELN, que debe durar 180 días, tal como acordaron los delegados de ambas partes el 8 de junio en La Habana (Cuba), al finalizar el tercer ciclo de conversaciones para alcanzar un acuerdo de paz.
En un comunicado publicado este viernes, los obispos indicaron que "este compromiso debe ser el mejor marco para avanzar en los diálogos de paz que están en marcha".