El Papa Francisco afirmó que la paz "es un don que requiere una actitud correspondiente por parte del ser humano y especialmente del creyente, que debe participar en la obra pacificadora de Dios".
El Santo Padre dirigió un mensaje a la Delegación del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla, a quien habló acerca de la guerra de Ucrania y aseguró que la paz "no es una realidad que podamos alcanzar solos, sino que es ante todo un don del Señor".
Al comienzo de su discurso en el marco de la Solemnidad de San Pedro y San Pablo, el Papa advirtió que aquellos argumentos utilizados desde Oriente y Occidente en la defensa de su primacía, "pueden parecer útiles para reforzar sus respectivas identidades, pero que en realidad acaban centrándose sólo en sí mismos y en el pasado".