La experiencia profundamente dolorosa de perder un embarazo cambió la vida de Lucía Mesones y le mostró el camino: “Mi misión es trabajar sobre la defensa de la vida. Me lo mostró muy claro Dios haciéndome pasar por el aborto espontáneo de mi quinto hijo”, expresa la mujer, que el próximo martes presentará en Montevideo su libro Ama a quien piensa en el aborto.
Ese duelo que le tocó atravesar en 2019, la llevó a preguntarse cómo era posible que, teniendo todo —familia, fe, apoyo— ella estuviera tan triste, y qué pasaría con las mujeres que han provocado un aborto. “Es inevitable pensar en esa mujer que lo provocó… porque esa herida va a surgir tarde o temprano. Es imposible pasar por esta vivencia habiéndola dejado de lado”, asegura.
A partir de ese momento, Lucía comenzó a instruirse y a dar charlas en colegios, parroquias y espacios laicos. “Nos dimos cuenta de la falta de información que había en los jóvenes… La palabra aborto está totalmente censurada, minimizada, hablando de una ‘interrupción voluntaria del embarazo’ que todos sabemos que no es real”.
Incluso dentro de la Iglesia, descubrió desinformación y resistencia: “Las puertas se cerraban dentro de la Iglesia Católica también. Eso era lo más doloroso”, admite a ACI Prensa, pero reconoce que “esa es la batalla del demonio, que quiere que bajemos los brazos, porque es una de sus batallas ganadas: que una madre mate a su propio hijo es lo que él más disfruta”.
Desde 2012, el aborto es legal en Uruguay. Sin embargo. Lucía denuncia que las mujeres en su país no reciben información completa antes de abortar:
“Conocerás la verdad y la verdad te hará libre. Cuando no te dicen la verdad absoluta de lo que vas a vivir, sólo te dicen que vas a pasar por un procedimiento médico y que no te va a pasar nada más, que vas a tener dolores menstruales y vas a expulsar un cúmulo de células, entonces no estás conociendo la verdad: te están empujando a una única salida”, plantea.