La fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN, por sus siglas en inglés) anunció la vigésima edición de la campaña Un millón de niños rezando el rosario, que este año tiene como objetivo rezar “por la paz y la unidad en un mundo herido por la división, los conflictos y el sufrimiento”.
El 18 de octubre de 2005, un grupo de laicos organizaba a niños y jóvenes para rezar el Rosario en las plazas de Caracas, la capital de Venezuela. En un momento determinado, los niños “se escarcharon” —les apareció escarcha en las manos mientras rezaban—, lo que para aquellos laicos fue una señal del Cielo, que les pedía profundizar en su apostolado
A raíz de ello, presentaron su idea a la Conferencia Nacional de Laicos (CNL), donde “se le da forma y organización [a la campaña] para que llegara a todas las escuelas y parroquias del país, a través de las instancias eclesiales”, según aseguró Ayeila Bello, coordinadora general del programa en Venezuela.
Desde entonces, agregó, la iniciativa busca “evangelizar a niños y jóvenes a través de los valores cristianos y las devociones de la Iglesia Católica”.
Con el apoyo de ACN, la campaña se ha popularizado en todo el mundo. El P. Anton Lässer, asistente eclesiástico de la fundación pontificia, llamó a los fieles de todo el mundo a unirse en oración la primera semana de octubre, especialmente el martes 7, día en que se celebra la fiesta de Nuestra Señora del Rosario.
El sacerdote pide desencadenar “una marea de oraciones en el mundo entero surgidas del corazón de los niños y hechas con confianza infantil”.