En el último libro sobre Papa Francisco, escrito por el periodista Javier Martínez-Brocal y titulado El sucesor: Mis recuerdos de Benedicto XVI, el Papa Francisco narró algunos detalles acerca del cónclave de 2005, en el que Benedicto XVI fue elegido como sucesor de Pedro.
El Pontífice aseguraba, entre otras cosas, que existió incluso una “maniobra” durante las votaciones por parte de algunos purpurados que deseaban “negociar un candidato diferente”.
El propio Papa Francisco justificó en el libro sus declaraciones y explicó que, a pesar de que “los cardenales juran no revelar lo que sucede en el cónclave”, los papas “tienen licencia para contarlo”.
Universi Domini Gregis
Tomando como referencia estas palabras de Francisco, el canonista Rosario Vitale explicó en conversación con ACI Prensa que “el documento que hoy regula la vacancia de la Sede Apostólica y la elección del Romano Pontífice es la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis”.
“En los números 59-60 prescribe explícitamente que está prohibido a los cardenales revelar a cualquier otra persona noticias relativas a la elección del Papa o de las Congregaciones Generales, ya sea antes, durante o incluso después de la elección”, señaló.