27 de septiembre de 2016 / 05:03 AM
El Papa Francisco desarrolló la homilía de la Misa de la mañana en la Capilla de la Casa Santa Marta –en la fiesta de San Vicente de Paúl– sobre la primera lectura que cuenta la historia de Job, quien vivía una gran "desolación espiritual" y "había perdido todo", y ofreció algunos consejos para todo aquel que se siente triste y deprimido.
"La desolación espiritual es algo que nos sucede a todos nosotros: puede ser más fuerte, más débil, pero es un estado del alma oscuro, sin esperanza, cauteloso, que hace no tener ganas de vivir, sin ver el final del túnel, con mucha agitación en el corazón y también en los pensamientos".
Pero también, "la desolación espiritual nos hace sentir como si tuviésemos el alma dura: falla, falla y no se quiere vivir: '¡Es mejor morir'!, añadió el Papa.