El Papa Francisco presidió en la tarde del sábado una Vigilia de Oración por el Sínodo de la Familia en la Plaza de San Pedro.
Después de la intervención de los responsables mundiales de algunos movimientos y realidades eclesiales, el Santo Padre pronunció su homilía, en la que trazó algunos aspectos de la familia y de la propia Iglesia, que es "madre" "capaz de engendrar la vida".
"La familia es lugar de santidad evangélica, llevada a cabo en las condiciones más ordinarias" y "cada familia es siempre una luz, por más débil que sea, en medio de la oscuridad del mundo".