En un nuevo ataque contra la Iglesia Católica, la dictadura de Daniel Ortega en Nicaragua canceló la personalidad jurídica y confiscó los bienes de una congregación de religiosas, a cuyo convento ingresó la policía el fin de semana para expulsarlas.
El régimen, a través del Ministerio de Gobernación, tomó la medida este martes 4 de julio sobre la Fundación Fraternidad Pobres de Jesucristo, según informa el medio nicaragüense Artículo 66.
El argumento esgrimido para dicha decisión es que la congregación "incumplió con sus obligaciones" por no reportar sus últimos estados financieros y tener "vencida" la junta directiva desde febrero de 2021.