La devoción a Nuestra Señora de Arabia se remonta a diciembre de 1948 cuando en Kuwait fue creada una pequeña capilla con este título, que custodiaba una estatua bendita en el Vaticano por el entonces Papa Pío XII. En 1957, Pío XII proclamó a Nuestra Señora de Arabia la patrona del territorio y desde 2011 la Santa Sede la nombró patrona de los países de los dos Vicariatos Apostólicos del Golfo: el de Arabia del Norte y el de Arabia del Sur.
Además, la Catedral de Nuestra Señora de Arabia es la sede del Vicario Apostólico de Arabia del Norte desde 2021. que cubre Bahrein, Kuwait, Qatar y Arabia Saudita, y cuenta aproximadamente con 2.5 millones de católicos que son en su mayoría migrantes trabajadores de diferentes naciones y culturas.
Según informó la fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), esta Catedral "está pensada no solo para los católicos en Bahrein, sino para todos los católicos en la Península, que comprende un total de cuatro países. Especialmente para los de Arabia Saudita, donde no hay ni una sola iglesia para atender a los casi 1.5 millones de católicos".
El párroco de la Catedral, el P. Saji Thomas, señaló a ACN que es "un ejemplo paradigmático de la armonía religiosa y la tolerancia del reino de Bahrein y un gran ejemplo de coexistencia pacífica para el mundo".