El Papa Francisco habló del remordimiento de conciencia y de la importancia para todo cristiano del Sacramento de la Reconciliación, e invitó a los fieles a "decir la verdad sobre nuestra vida" y confesar al Señor los pecados "para que perdone".
Al reflexionar sobre el Evangelio de San Lucas, dedicado a la reacción de Herodes ante la predicación de Cristo, el Pontífice explicó que el rey no sabía "qué pensar" de Jesús pero "sentía dentro" algo que "no era una curiosidad", sino un "remordimiento en el alma", "en el corazón".
Pero se le entregó Jesús a Pilatos, cometiendo "un crimen a través de otro", "el remordimiento de la conciencia con otro crimen", como quien "asesina por temor".