Al iniciar el segundo día de su viaje a Polonia, el Papa Francisco hizo una breve visita privada al Convento de las Hermanas de la Presentación, a cuyas religiosas animó a seguir educando a las jóvenes generaciones y sembrar en ellas la semilla de la generosidad.
La Congregación de las Vírgenes de la Presentación de la Bienaventurada Virgen María, conocida como las Hermanas de la Presentación, es la primera congregación religiosa de no claustro que se estableció en Polonia.
Fue fundada en Cracovia en 1627 por la Beata Sofía Czeska y desde sus inicios su carisma ha sido la educación de los niños y jóvenes. Hoy dirige escuelas y albergues para niños y se dedica a la enseñanza de la asignatura de religión.