1 de junio de 2021 / 01:59 PM
El Arzobispo estadounidense Fulton Sheen, Venerable en proceso de beatificación, contó meses antes de fallecer que su mayor inspiración fue una niña china de once años que murió por la Eucaristía.
Mons. Sheen relató en una entrevista que cuando los comunistas se apoderaron de China a mediados del siglo XX, apresaron a un sacerdote en su propia rectoría cerca de la iglesia.
Desde la ventana, el presbítero pudo ver cómo los comunistas entraron a profanar el templo. Estos tomaron el copón del sagrario y lo tiraron al suelo, quedando esparcidas 32 hostias consagradas.