Al poco tiempo de la entrega del Premio Nobel de la Paz 2014 a Malala Yousefzai de Pakistán y Kailash Satyarthi de India, el Papa Francisco elogió a los premiados por sus esfuerzos por promover la paz. Sin embargo, decidió no reunirse con el Dalai Lama, que ganó el premio en 1989.
El Papa probablemente declinó reunirse con Tenzin Gyatso, el décimo cuarto Dalai Lama, para no complicar las relaciones del Vaticano con la República Popular de China.
El Cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado Vaticano, envió un mensaje a la Cumbre Mundial de Premios Nobel de la Paz, señalando que el Papa Francisco está "profundamente agradecido por el compromiso de los participantes de la cumbre para promover la paz y la fraternidad entre los pueblos, y por sus esfuerzos por encontrar soluciones a los conflictos de nuestros tiempos".