1 de diciembre de 2014 / 11:43 AM
En la mañana de hoy y después del intenso viaje de tres días en Turquía, el Papa Francisco ha recibido a los obispos de la Conferencia Episcopal de Suiza que están en visita ad limina en Roma, a quienes dijo que "sin una fe viva en Cristo resucitado las hermosas iglesias y monasterios terminan convirtiéndose poco a poco en museos".
En el discurso que les ha dirigido el Pontífice, les ha animado a mantener viva la tradición de la Iglesia y a tomar muy en cuenta el trabajo de los laicos.
En sus palabras, el Santo Padre señaló que "sin una fe viva en Cristo resucitado las hermosas iglesias y monasterios terminan convirtiéndose poco a poco en museos; todas las obras dignas de alabanza y las instituciones pierden su alma dejando solamente entornos vacíos y personas abandonadas".