La Comisión de las Conferencias Episcopales de la Unión Europea (COMECE) ha lanzado el “Consejo Asesor de la Juventud”, un órgano “para asesorar a la Comisión en políticas relevantes para los jóvenes”.

El Consejo está formado por 28 representantes de los Consejos Nacionales de la Juventud de los Estados miembros de la UE y del Foro Europeo de la Juventud.

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El lanzamiento, que tuvo lugar a principios de julio, se produjo tras una reunión de miembros de la Plataforma Juvenil de COMECE celebrada en la Comisión Europea, en Bruselas, el 16 de junio.

Como parte de los esfuerzos en curso para reforzar la participación juvenil a nivel europeo, los miembros de la Plataforma Juvenil presentaron una carta abierta dirigida al Comisario para la Equidad Intergeneracional, la Juventud, la Cultura y el Deporte, Glenn Micallef, en la que compartieron propuestas concretas para que el Consejo sea “inclusivo, accesible y verdaderamente representativo de la diversidad juvenil en Europa”. 

Según informó la COMECE en un comunicado, varios de los elementos propuestos en la carta se han incorporado en la propuesta de funcionamiento del Consejo.

La misiva recoge varias propuestas para asegurar que el Consejo Asesor de la Juventud empodere a los jóvenes para desempeñar un papel significativo en la toma de decisiones de la UE. 

Asimismo, insta a incluir organizaciones juveniles que actualmente no forman parte de las redes de la Comisión Europea, aportando así perspectivas y voces nuevas que a menudo son ignoradas.

Los miembros de la plataforma subrayaron también la importancia de herramientas de apoyo como la interpretación en lengua de signos o la atención a jóvenes padres.

Además, para garantizar una participación más amplia en el Consejo Asesor de la Juventud de la Unión Europea (UE), la carta recomienda incluir jóvenes de grupos vulnerables, como “personas con discapacidad o con antecedentes migratorios”.

Emilio Dogliani, asesor de COMECE para asuntos de Juventud y responsable de la Plataforma Juvenil, explicó que “esto reflejaría el compromiso de la Comisión Europea con la inclusión y participación reales, pero la estructura actual propuesta parece no dejar espacio para la representación de la juventud vulnerable”.

Según la Plataforma Juvenil de COMECE, el Consejo debería reflejar los valores fundamentales de la UE, como la solidaridad y el compromiso cívico, y permitir tanto la continuidad como la adaptabilidad ante las cambiantes necesidades de los jóvenes.

Asimismo, la Plataforma reclama que el Consejo no sea simplemente un órgano “asesor”, sino que actúe como un puente entre las instituciones de la UE y los movimientos juveniles de base, promoviendo el diálogo intercultural e interreligioso.