A raíz del proyecto de ley que busca aprobar la eutanasia en Uruguay, el Obispo de Maldonado-Punta del Este- Minas, Mons. Milton Tróccoli, aseguró que “hay otras posibilidades legisladas que ayudan más a una muerte digna, que seguir fomentando leyes que promueven la muerte”.

De esta manera, el prelado adhirió a lo expresado hace poco más de una semana por la Conferencia Episcopal Uruguaya en un documento titulado “Afrontar con amor el final de la vida”, en el que destacaron la dignidad de la persona y su valor “absoluto, único e insustituible”.

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:

“Necesitamos fortalecer una conciencia social que acoja, proteja, promueva y acompañe a cada persona a lo largo de toda su vida, incluida la etapa final de su existencia terrena, con el apoyo fundamental de la familia, los cuidados paliativos y una auténtica experiencia espiritual”, expresaron los prelados en el comunicado. En el mismo texto, proponen la medicina paliativa como vía para “cuidar, aliviar y consolar” y piden a los legisladores que actúen guiados por la dignidad de la persona y los Derechos Humanos.

El proyecto de ley fue presentado por el diputado Ope Pasquet, del Partido Colorado, y discutido en el periodo legislativo anterior, pero no logró entonces los votos necesarios para aprobarse. En este nuevo año legislativo, el Frente Amplio presentó una nueva propuesta para regular la eutanasia. 

En ese contexto, Mons. Tróccoli explicó a FM Gente que el documento del episcopado “está basado sobre todo en la dignidad de toda vida humana y en su cuidado durante todos los momentos, incluida la etapa del final de la vida terrena, a través de la ayuda a la familia, de la medicina paliativa y también desde un genuina experiencia espiritual”.

Ante el avance de la medicina en materia de cuidados paliativos y sedación terapéutica, “nadie tendría que llegar con esos sufrimientos al momento de la muerte”, consideró.

“Hay otras posibilidades legisladas que ayudan más a una muerte digna, que seguir fomentando leyes que promueven la muerte, en un país donde hay un índice tan grande de suicidio e incluso de suicidio juvenil”, advirtió.

En otros países donde la eutanasia es legal, afirmó el prelado, los resultados no sólo no fueron “pacíficos” sino que generaron “desconfianza hacia los médicos”.

Como ejemplo, se refirió al caso de Inglaterra, donde “se avanzó incluso hasta la eutanasia para menores de edad y adolescentes, pero después se echó para atrás con esa ley”, mencionó.