Por Anthony Di Mauro
Por la Divina Providencia, la hermana dominica Serafina Viagrande, de 94 años, se encontró entre los invitados VIP del mitin de victoria de Trump en 2025, un evento previo a la investidura que se llevó a cabo el día anterior. En medio de asistentes de alto perfil, ofreció oraciones y bendiciones, demostrando que la fe no conoce fronteras, incluso entre la élite.
La hermana Serafina, monja dominica nacida en Sicilia (Italia), ha dedicado su vida a la educación y al ministerio musical. Luego de emigrar a Estados Unidos cuando era niña, se unió al convento en 1949 y más tarde fue pionera en programas de música en escuelas católicas en la diócesis de Pittsburgh.
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Con una maestría en educación musical, ha inspirado a generaciones de estudiantes a través de su pasión por la música como forma de expresión espiritual y su profundo amor por Jesús.
Al reflexionar sobre su experiencia en el mitin que tuvo lugar el día anterior a la inauguración, la hermana Serafina dijo: “A través de mi experiencia como dominica, pido al mundo que siempre sea fiel a Jesús porque Él será fiel a ustedes. Si ustedes son fieles a Jesús, Él será fiel a ustedes”.
Al describir el ambiente de la celebración, la hermana Serafina lo calificó de “experiencia extraordinaria” y señaló que la gente buscaba “paz, consuelo y un futuro”. Cree que “Donald Trump cumplirá sus promesas de restaurar el mundo, y eso es lo que la gente está buscando”.
Cuando se le preguntó sobre las enseñanzas espirituales que ofrecería a quienes buscan una relación con Dios, dijo: “Pido a la gente que ame a Jesús y que no se rinda. Jesús siempre nos ayudará. Debemos confiar en él y en su gran amor por la humanidad”.
La hermana Serafina anima a todos a recurrir a Jesús en la vida diaria, creyendo que Él siempre les brindará guía y consuelo. En cuanto a sus oraciones por los invitados VIP al evento, expresó su confianza en que “Dios escucha nuestras oraciones y, si somos sinceros, Él responderá”.
También resaltó la importancia de la sinceridad de corazón: “Creo de todo corazón que Jesús responderá a los deseos de la gente”. Al reflexionar sobre el impacto del mitin comentó: “Fue muy conmovedor. Siento que el presidente Trump y todas las personas que trabajan con él son muy sinceros en su propósito de cambiar este país”.
La hermana Serafina ofreció un mensaje de confianza y fe a la familia Trump: “Confíen en Dios. Tengan fe en Él y Él cumplirá todas las promesas. Si nos dirigimos a Dios en todas nuestras relaciones con el mundo, Él responderá”, afirmó.
El Dr. Martin Waugh, médico de familia y defensor de la hermana Serafina, la acompañó a la manifestación. Waugh, que se formó en la Universidad de Yale y ha dedicado su carrera a abordar la salud cerebral y el bienestar espiritual, conoció a la religiosa italiana asistiendo a la Misa diaria en New Haven, Connecticut. “Dios no ha terminado con ella y ella quiere llevar cada vez más a Jesús a todas las personas que conoce”, dijo.
Durante la celebración, la hermana Serafina rezó con varias personalidades, entre ellas el ex secretario de prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer. “Debe haber unas 40 personas que acudieron a ella en busca de bendiciones y oraciones”, recordó Waugh. “La gente a menudo se marchaba llorando, profundamente conmovida por su presencia y sus palabras proféticas”.
Waugh atribuye la vitalidad y longevidad de la hermana Serafina a su profunda fe y devoción. “Su recepción diaria de la Eucaristía —Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad— le ha dado vida, más energía y más vitalidad”, explicó. “Con demasiada frecuencia descartamos a nuestros mayores a los 80 o 90 años, pero [la hermana Serafina] demuestra que Dios les da y la fuerza para realizarlas”.
Del mitin a la gala: el inspirador impacto de la hermana Serafina
Después de la reunión, la hermana Serafina se dirigió a la Gala Inaugural Cristiana, donde fue recibida calurosamente por un flujo constante de asistentes que buscaban oraciones y bendiciones: desde personas de diversos orígenes hasta figuras prominentes, la monja dominica ofreció apoyo espiritual, encarnando su creencia de que la fuerza de Dios está disponible para todos los que están llamados a servir.
Entre quienes recibieron su bendición se encontraba Andrea Sheldon Lafferty, presidenta del evento y directora ejecutiva de la Fundación Thrive America. Lafferty, amiga íntima de la hermana Serafina y Waugh, desempeñó un papel clave en la organización del evento, que tuvo entradas agotadas y al que asistieron 750 personas de todo Estados Unidos, y también de Israel.
A pesar de las gélidas temperaturas y los cierres de carreteras en Washington, DC, la hermana Serafina y Waugh caminaron alrededor de un kilómetro hasta el lugar, impulsados por su inquebrantable compromiso de causar un impacto significativo en una de las galas más exclusivas de las celebraciones inaugurales.
La velada contó con una actuación musical del artista nominado al Grammy Danny Gokey; y había además un premio elaborado con vidrio soplado, creado por Chris McGahan y destinado al actor católico Jim Caviezel. Lamentablemente, Caviezel no pudo asistir porque estaba enfermo.
Para darle más peso a la velada, el programa incluyó comentarios de Steve Green, de la familia Hobby Lobby, reforzando el mensaje de fe y unidad del evento.
Al concluir la gala, quedó claro que la presencia de la hermana Serafina dejó un impacto duradero en quienes la encontraron. Su inquebrantable dedicación a la oración y al amor resonó profundamente en los asistentes, y sirvió como un conmovedor recordatorio del poder de la fe y la importancia de la conexión espiritual en tiempos de cambio, y también fue significativo para ella.
Reflexionando sobre la velada, la hermana Serafina comentó: “Pido a la gente que ame a Jesús y que no se rinda, porque Jesús siempre nos ayudará. Debemos confiar en él y en su gran amor por la humanidad”.
Waugh describió la velada como profundamente conmovedora y afirmó: “Mi experiencia en la cena cristiana fue que la gente se reunió para agradecer a Dios por nuestro cambio de gobierno y luego se sintieron atraídos hacia la hermana Serafina porque muchos habían perdido a sus madres y abuelas. Ella oraba por ellos”.
“Muchas personas se fueron con lágrimas en el rostro. Y el corazón de la hermana Serafina estaba lleno de alegría porque sentía que había amado a otros en nombre de Jesús”.
Según Waugh, el deseo de Año Nuevo de 2025 de la hermana Serafina reflejaba su misión de fe y servicio de toda la vida: “Su deseo era simple: Señor, ayúdame a acercar más personas a Jesús”.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en elNational Catholic Register
Con sede en Spokane, Washington, Anthony Di Mauro es el fundador y director ejecutivo de The Relic Project , que tiene como objetivo establecer una biblioteca mundial en línea de reliquias de primera y segunda clase para que nosotros, como Iglesia, podamos saber qué santos tenemos y dónde se encuentran y ofrecer a las personas la oportunidad de solicitar la veneración segura de estas reliquias.
