Jessica Hanna, una madre católica de cuatro hijos y defensora de la vida que decidió renunciar a los tratamientos contra el cáncer por el bien de su hijo por nacer, murió el 6 de abril.
Su esposo, Lamar, compartió la noticia de su fallecimiento en la cuenta de Instagram de Jessica, donde ella era conocida como @blessedbycancer (bendecida por el cáncer).
"A las 8:02 p.m. del sábado 6 de abril, mi hermosa novia Jessica fue pacíficamente hacia su recompensa eterna", escribió Lamar Hanna. "Recibió la extremaunción y el perdón apostólico del P, Cabib Sharpe [el] jueves. El sábado estaba muy tranquila y, rodeada de su querida familia, exhaló su último suspiro. El cáncer era demasiado agresivo. Sufrió con alegría y sin miedo en sus últimos días. Por favor, mantengan a nuestra familia en sus oraciones".