La Arquidiócesis de Rosario (Argentina) culminó el Año Mariano Arquidiocesano, un periodo dedicado a la Virgen patrona y “fundadora de la ciudad”, al cumplirse 250 años de su llegada.
La Virgen del Rosario llegó a la región en 1773, cuando el poblado se denominaba "Pago de los Arroyos" y la Argentina como tal aún no había nacido. Por eso la llaman “fundadora”, ya que les dio el nombre a la ciudad y a la Arquidiócesis de Rosario.
Si bien inicialmente había sido anunciado desde el 7 de octubre de 2022 hasta el mismo día de 2023, se extendió por tres meses más con el objetivo de que los fieles tuvieran más tiempo para peregrinar a la Catedral y Santuario de Nuestra Señora del Rosario, llevarle sus intenciones a la Virgen, y recibir indulgencia plenaria.