La Iglesia se prepara para celebrar el Jubileo por los 1.500 años de los mártires árabes

El martirio de San Aretas. El martirio de San Aretas. | Crédito: Dominio público.

La Iglesia Católica en la Península Arábiga se prepara para celebrar, desde el 24 de octubre, el Jubileo por los 1.500 años del martirio de San Aretas y sus más de 100 compañeros, bajo el poder del rey judío Yusuf Dhu Nuwas.

En declaraciones recogidas por la agencia vaticana Fides, Mons. Aldo Berardi, Vicario Apostólico de Arabia del Norte, resaltó que “este año lo consideramos un año de gracia para todo el vicariato y para todas las comunidades cristianas presentes en el Golfo Arábigo”.

“Celebramos en la fe la memoria de nuestros antepasados cristianos que dieron su vida por Cristo, permaneciendo fieles hasta el final”, señaló.

La celebración se vivirá tanto en el Vicariato Apostólico de Arabia del Norte, que comprende a Baréin, Qatar, Kuwait y Arabia Saudita; como en el Vicariato Apostólico de Arabia del Sur, que abarca los Emiratos Árabes Unidos, Yemen y Omán.

Un legado de martirio: La historia de San Aretas y sus compañeros

San Aretas y sus compañeros son venerados en la Iglesia Católica y en la Ortodoxa. Fueron cristianos que vivían en la ciudad de Naŷrán y que sufrieron la persecución por odio a la fe y el martirio en el año 523 d.C.

Más en Mundo

En el siglo VI, Yusuf Dhu Nuwas, rey del reino de Himya, que llegó a abarcar el actual Yemen, una parte occidental de Omán y territorios del sur de Arabia Saudita, se convirtió al judaísmo y encabezó una brutal persecución contra los cristianos en la región, obligándolos a convertirse bajo amenaza de muerte. Se estima que martirizó a más de 4.000, quemando vivos a muchos de ellos, incluso mujeres y niños. San Aretas fue decapitado junto a sus compañeros.

El Papa Francisco concede indulgencia plenaria

De acuerdo a Fides, el Papa Francisco concedió indulgencia plenaria para el Jubileo de los mártires árabes, que se extenderá hasta el 23 de octubre de 2024. Podrán obtenerla quienes peregrinen a la Catedral de Nuestra Señora de Arabia en Awali (Baréin), a la Catedral de San José en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) o a la parroquia de San Aretas.

Mons. Berardi aseguró que “nuestra vida es una peregrinación”, y resaltó que “nuestra peregrinación a menudo no es fácil a causa de las dificultades de la vida, del entorno y de las sociedades en las que vivimos”.

“Pero siempre es posible seguir a Jesús y el Evangelio, cuando expresamos nuestro amor al Padre, y cuando permitimos que el Espíritu Santo nos guíe. Si esto sucede, nuestra peregrinación se convierte en una bendición. Y el Jubileo nos ofrece la oportunidad de comprender mejor nuestra vocación como Iglesia católica en esta región”, manifestó.

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:

Un regreso anhelado: Reliquia de San Aretas vuelve a la Península Arábiga

Uno de los momentos más esperados del Jubileo de los mártires árabes es la llegada de una reliquia de San Aretas a Baréin en noviembre de 2023, un obsequio del Patriarca Ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I.

Cuenta la tradición que las reliquias de San Aretas y sus compañeros mártires se encontraban resguardadas en un santuario de forma cúbica que, en tiempos antiguos, se erigía como un importante centro de peregrinación para los cristianos árabes. Sin embargo, en el siglo VII, este santuario fue devastado y los cristianos fueron expulsados del sur de Arabia. Muchas de las reliquias que se conservaban en el santuario encontraron refugio en diversos monasterios e iglesias en Siria e Irak.

La reliquia de San Aretas, con el paso del tiempo, fue protegida y venerada en la región del Monte Athos, en Grecia.

Llamados a ser “mártires cotidianos”

Mons. Berardi aseguró que los fieles en la región “percibimos nuestra continuidad con las comunidades y monasterios cristianos que florecieron en esta región. Los restos arqueológicos nos lo confirman”.

“Este año jubilar es una oportunidad para renovar nuestro espíritu misionero y profundizar en nuestra fe. Nosotros, por nuestra parte, debemos dar testimonio de Cristo y del Evangelio viviendo una vida santa y coherente”, expresó.

El Prelado recordó que “tenemos predecesores cristianos en estas tierras, que nos dan ejemplo”, por lo que “ahora nos toca a nosotros ser testigos del Resucitado en el tiempo presente”.

“Inspirados por los mártires árabes, los cristianos de la Península Arábiga están llamados hoy a ser 'mártires cotidianos', que dan constantemente testimonio vivo de Cristo y de su mensaje en las pequeñas cosas de cada día de su vida”, manifestó.

Suscríbete a ACI Prensa

Recibe nuestras noticias más importantes por email.

Dona a ACI Prensa

Si decides ayudarnos, ten la certeza que te lo agradeceremos de corazón.