La misionera de la Consolata Esperanza Becerra cumplirá 12 años de labor misionera en Mongolia, país en el que el Papa permanecerá hasta el próximo lunes. A su juicio, la presencia del Pontífice “confirma que Dios escoge siempre a los pequeños”.
No en vano, el país asiático constituye un territorio de misión en el que apenas hay 1.500 fieles locales y nueve lugares de culto para cubrir 1.500 millones de kilómetros cuadrados de territorio entre China y Rusia, según refiere Obras Misionales Pontificias.
Como destaca la misionera, se trata de una “Iglesia jovencita, que está creciendo” y que cumple apenas 31 años desde que se reanudara la labor misionera tras la caída del comunismo en la región a finales del siglo pasado.