Ante el robo de objetos sagrados y de la custodia con el Santísimo Sacramento en la parroquia Sagrada Familia de Buenos Aires (Argentina), desde el Arzobispado llaman a realizar actos de reparación y desagravio.
El Obispo Auxiliar de la capital argentina, Mons. Alejandro Giorgi, envió una carta a la comunidad parroquial, en nombre del Arzobispado, en la que lamenta lo sucedido la tarde del sábado 22 de julio.
El Prelado recuerda que pocos días antes había ocurrido un hecho similar en la parroquia Sagrada Eucaristía, y consideró "penosamente llamativo" que el robo se haya dado en horas de la tarde, mientras las rejas protectoras del templo se encontraban "totalmente cerradas".