En el año 1530, Santa Ana pasó a ser la patrona de la ciudad de Tudela (Navarra, España), donde desde hace siglos se venera esta imagen de cuyo pecho se asoman las cabezas de la Virgen María y del Niño Jesús.
En los días previos a la fiesta de Santa Ana, cuya festividad se celebra cada 26 de julio, la ciudad de Tudela se engalana para honrar a su patrona, la madre de la Virgen María y abuela de Jesús.
En la capilla principal de la imponente catedral de la ciudad, que recibe el nombre de Santa María la Mayor, se guarda la imagen de esta santa que representa 3 generaciones.