El Papa Francisco recibió en audiencia en el Vaticano a una delegación de administradores públicos franceses, a quienes pidió evitar "la cultura del descarte" y promover el cuidado de la vida hasta su fin natural.
En su discurso, el Papa pidió "dar prioridad a las necesidades esenciales de sus ciudadanos, que con demasiada frecuencia se descuidan en favor de temas de moda que tienen menos que ver con su vida cotidiana".
Para el Papa Francisco, "el método democrático y representativo también debe permitirte hacer llegar a las más altas autoridades las aspiraciones y necesidades reales de la población, lejos de cualquier ideología o presión mediática".