Para el Papa Francisco, el fútbol es importante para "nuestro tiempo" y por ello invitó a los jugadores de los equipos italianos de la Juventus y del Lazio a ser ejemplo de lealtad, honestidad y concordia.
"Aquellos que son considerados 'campeones' se convierten fácilmente en figuras de referencia. Por ello cada carrera es una prueba de equilibrio, de dominio de sí, de observancia de las reglas", afirmó el Papa a los miembros de ambos equipos que mañana disputarán la final de la Copa Italia.
Francisco los invitó a ser "testimonios de lealtad, de honestidad, de concordia y de humanidad". "A veces –explicó- en los estadios se dan, por desgracia, episodios de violencia, que interrumpen el sereno desarrollo de los partidos y el sano divertimento de la gente", advirtió.