Horas de terror vivieron los habitantes del municipio de Buenos Aires, en el departamento colombiano del Cauca, cuando las disidencias de las FARC ingresaron disparando y tomaron de rehén al sacerdote para obligarlo a transmitir sus mensajes.
El asedio de diez horas comenzó en la mañana del martes 16 de diciembre, cuando las disidencias de alias Iván Mordisco atacaron la estación de la Policía, la alcaldía y la oficina del Banco Agrario.
Mientras la población buscaba refugiarse de los disparos y detonaciones, los guerrilleros ingresaron a la casa cural y obligaron al sacerdote a transmitir sus mensajes a través de los parlantes de la iglesia.
“Querida Policía, ellos dan garantías para que se abstengan (…) Entréguense por favor. Entreguen los fusiles”, es uno de los mensajes que transmite el párroco.
Debido a los combates, murieron dos policías y el municipio ha quedado seriamente afectado.