La Conferencia Canadiense de Obispos Católicos (CCCB) y el Cardenal Francis Leo de Toronto han instado al primer ministro Mark Carney a retirar el citado acuerdo del Partido Liberal con el Bloc Québécois para eliminar las exenciones por creencias religiosas de las leyes canadienses contra el discurso de odio.
En una carta publicada el 4 de diciembre, el presidente de la CCCB, Mons. Pierre Goudreault de Sainte-Anne-de-la-Pocatière, advirtió que la derogación del artículo 319(3)(b) del código penal —que protege las expresiones u opiniones de buena fe basadas en textos religiosos del procesamiento por discurso de odio— tendría un "efecto inhibidor sobre la expresión religiosa".
"La eliminación de esta disposición corre el riesgo de generar incertidumbre en las comunidades religiosas, el clero, los educadores y otras personas que podrían temer que la expresión de enseñanzas morales o doctrinales tradicionales pueda malinterpretarse como discurso de odio y someter al orador a procedimientos que amenazan con penas de prisión de hasta dos años", escribió Mons. Goudreault.
La CCCB instó al gobierno a mantener la defensa del texto religioso.
Como alternativa, los obispos propusieron dos medidas: una garantía pública de que “la expresión, la enseñanza y la predicación religiosa de buena fe no estarán sujetas a persecución penal en virtud de las disposiciones sobre propaganda de odio” y la consulta obligatoria con líderes religiosos, expertos legales y grupos de libertades civiles antes de cualquier cambio que afecte a la libertad religiosa.
El Cardenal Leo se hizo eco de la preocupación en una carta a los católicos de Toronto que compartió con los miembros del Parlamento (diputados) de la archidiócesis. “Como católicos, debemos rechazar siempre firmemente toda forma de odio y discriminación”, escribió.