La legislación que brindaría protección a las personas sin estatus migratorio legal ha recibido el respaldo del Obispo de El Paso, Texas, Mons. Mark J. Seitz, quien se desempeñó como presidente del Comité de Migración de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos.
El proyecto de ley (HR 4393), que no establece una vía directa a la ciudadanía, otorgaría a las personas sin estatus legal la oportunidad de obtenerlo mediante trabajo y sanciones financieras, siempre que no tengan antecedentes penales. Aplicaría a quienes ingresaron a Estados Unidos antes de 2021.
La medida autorizaría fondos para la seguridad fronteriza y crearía centros para solicitantes de asilo mientras se considera su caso. Exigiría que los casos de asilo se resuelvan en un plazo de 60 días.
La representante republicana de Florida, María Elvira Salazar, patrocinó la medida, a la que denominó Ley de Dignidad y que presentó por primera vez en 2022. La representante demócrata de Texas, Veronica Escobar, copatrocinó el proyecto junto con otros 22 miembros del Congreso. No se han programado audiencias ni otras acciones legislativas.
Mons. Seitz, quien tiene previsto dirigirse a sus colegas obispos el 11 de noviembre para hablar sobre inmigración, declaró en agosto, en un comunicado conjunto con Salazar, que está “profundamente agradecido a la congresista Salazar, a la congresista Escobar y a sus colegas por este compromiso constante de trabajar de forma bipartidista”.
El obispo afirmó: “El Papa León XIV ha enfatizado la responsabilidad de todos los líderes políticos de promover y proteger el bien de la comunidad, el bien común, en particular defendiendo a los vulnerables y marginados. Bajo nuestro sistema actual, familias de todo el país viven con miedo. Propuestas bipartidistas como la Ley de Dignidad representan un paso hacia el cumplimiento del llamado de nuestro Santo Padre a ofrecer un mejor camino a seguir, uno que comience y termine con el respeto a la dignidad inherente a cada persona, otorgada por Dios”.